Los 50 inmigrantes que serán trasladados de Canarias a Cuenca capital tendrá como destino definitivo viviendas de nueva construcción en la ciudad «posiblemente después de Navidad», según ha precisado Braulio Carlés, responsable de Accem Castilla-La Mancha, ONG que coordina la llegada de este colectivo.
De manera provisional, 30 de ellos se ubicará en al antiguo internado anexo al Colegio La Sagrada Familia, conocido popularmente como ‘Las Pepas’, mientras que el resto se establecerá en hoteles de la capital. Carlés ha indicado «en unos días, como muy tarde a principios de la semana que viene, llegará el primer grupo. El viernes pasado estuvimos hablando con los padres ya que tenían algunas dudas y no sabían exactamente cómo iban a ser. Lo entendemos perfectamente e incluso se merecían una disculpa. Todo el mundo actúa con buena voluntad pero a veces se manda un documento aséptico que puede generar dudas. La reunión fue muy agradable. La gente planteó sus dudas y creo que se han entendido las cosas muy bien. Incluso algún padre se ofreció a colaborar de manera voluntaria con nuestro dispositivo».
Respecto a la veintena restante para quienes se estaba buscando alojamiento, estas mismas fuentes han indicado que estarán «en hoteles de la ciudad de Cuenca hasta que las viviendas donde vamos a ir de una forma definitiva estén disponible. Ya hemos hablado con algunos hoteles y se han mostrado muy disponibles para lo que haga falta. La verdad es que muy bien», muy bien.»
El responsable regional de ACCEM señala que «la idea es que en cuanto den permiso de licencia de primera ocupación podamos acceder a ellas. Se demorará un par de meses o tres con lo cual tardaremos un poquito de tiempo hasta que eso esté resuelto. Son 22 viviendas y hay espacio para 54 personas. Ya están construidas y solamente falta la licencia de primera ocupación. Está todo listo esperando que nos den este documento». En este sentido, ha manifestado que «fundamentalmente dependemos del Ayuntamiento, que nos dé el informe de primera ocupación. Va todo por buen camino. La voluntad del alcalde pues ya nos la expresó el otro día y estamos esperando el informe. Espero que después de Navidad podamos incorporarnos».
Servicios adecuados y formación
Antes de la entrada del primer grupo en la residencia de la Sagrada Familia ha sido necesario realizar varias intervenciones relacionadas con los servicios básicos. «Han sido temas de luz, cableado, temas de internet…No son temas muy importantes y esperamos que en esta semana esperamos que esté todo resuelto. Se trata de que cuando llegue la gente esté todo correcto. Es por seguridad, seriedad…Que puedan sentirse más seguros y más cómodos».
Así, una vez asentados está contemplada la intervención de un equipo interdisciplinar para que la estancia y la integración sea lo más grata posible. «Hacen falta trabajadores sociales, abogados, psicólogos, profesores de español, gente formada en el ámbito del empleo… El idioma es fundamental y van a recibir muchas clases de español para que puedan comunicarse y entender. También está el tema de la formación: qué tipo de formación traen y en función de eso, pues ver por dónde les orientamos. Si vienen con estudios superiores pues ver cómo podemos homologar, complementar…Hay que tratar de forma personal a cada persona que llega».
