Lesionados medulares conciencian en la piscina de Tiradores sobre los riesgos de las zambullidas

El objetivo de Aspaym es prevenir de aquellos saltos y chapuzones que pueden cambiar la vida de forma drástica e irreversible.

Cuenca prosigue la campaña frente a las zambullidas que causan una lesión medular. David Culebras, vicepresidente de ASPAYM (Asociación de personas con lesión medular y otras discapacidades físicas) Cuenca, estuvo esta semana presente en la piscina municipal de los Tiradores, concienciando a sus bañistas sobre el riesgo de zambullirse también en estos espacios aparentemente controlados. A pesar de lo que puedan indicar las apariencias, los datos no mienten: en el último año, 6 de las 8 personas lesionadas medulares por una zambullida tuvieron su accidente en una piscina.

La campaña ‘Con cabeza sí, de cabeza no’ es una acción conjunta de ASPAYM con el Hospital Nacional de Parapléjicos, la SERMEF, Cruz Roja y la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo. Esta acción cuenta con un gran éxito en redes y medios de comunicación, año tras año. El objetivo es prevenir de aquellos saltos y chapuzones que pueden cambiar la vida de forma drástica e irreversible.

Recalcan las dos precauciones esenciales a la hora de lanzarse al agua para prevenir una lesión medular. «Debemos asegurarnos previamente de la profundidad real y tirarnos siempre con las manos por delante».

En el material informativo de la campaña, la presidenta de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF), la Dra. Carolina De Miguel, insta «a toda la población a extremar la precaución en cualquier medio acuático y a seguir dos sencillas pautas para prevenir estas lesiones: conocer la profundidad de la superficie acuática y evitar tirarse de cabeza. Los médicos rehabilitadores, entre muchas otras patologías, tratamos las lesiones medulares, y destacamos que se pueden evitar siendo prudentes. Cuando estamos en estos entornos veraniegos las personas tendemos a estar más relajadas, pero es necesario no bajar la guardia. Diversión y relax con prudencia es posible».

La presidenta de la SERMEF subraya que «en el mar o en el río, cuando el agua está turbia y no se ve el fondo, puede haber una rama o una roca oculta». Destaca también que «se ha de tener en cuenta que las olas y las corrientes pueden cambiar la distancia al fondo, aunque nos bañemos dos días consecutivos. En las piscinas también hay que tener precaución».

«Recomendamos introducirse en el agua de forma tranquila y con cuidado, valiéndose de los bordes del perímetro acuático y evitar riesgos lanzándose al agua de cabeza, de pie estilo palillo o dando volteretas o giros. También es necesario evitar lanzarse desde demasiada altura», afirma la Dra. De Miguel.