La oferta de autobuses urbanos de este sábado fue incapaz de absorber la demanda de viajeros que querían usar el transporte público para acceder al Casco Antiguo, donde se celebraban los actos del festival histórico Cuenca Histórica. Al contrario de otras ediciones, en las que se habilitaron lanzaderas desde la Plaza de la Constitución con una frecuencia de quince minutos, en esta ocasión se mantuvieron los horarios habituales de fin de semana: frecuencias de una hora tanto para la línea 1 (Estación del AVE-Plaza Mayor) como para la línea 2 (CC El Mirador-El Castillo). Ambos itinerarios finalizaron y comenzaron su recorrido en la iglesia de San Felipe de Neri.
La falta de refuerzo propicio que en los momentos de mayor afluencia -en torno a las siete de la tarde, antes del comienzo de la representación teatral de la conquista de la ciudad- algún servicio se viese completamente desbordado y decenas de pasajeros en tierra. La parada de Colón-Carretería fue la última en la que pudieron subirse viajeros al vehículo de la línea 1 que cubría ese servicio en ese momento ya que iba lleno y no cabían más. En las siguientes paradas como Antigua Escuela de Enfermería Puente de la Trinidad o Palafox ninguno de los que esperaban (algunos de ellos alrededor de una hora, según señalaron) pudieron subirse. Las quejas por las largas demoras se extendieron a otros momentos de la jornada.
Durante este fin de semana el Ayuntamiento de Cuenca ha establecido cortes y restricciones al tráfico rodado en la Parte Alta de la ciudad: este sábado 7 no se podía acceder con vehículo privado de 16:30 a 21:30 horas. Además, hubo restricciones puntuales en otros momentos por parte de Policía Local y Agentes de Movilidad en función de la aglomeración de público.
La situación de desborde de la capacidad de los autobuses urbanos se ha repetido en otras ocasiones, como en las ‘horas punta’ de San Mateo y de sus actos previos y también en algunos fines de semana de otoño.