La programación especial de actividades navideñas del Centro Comercial Mirador de Cuenca arranca este viernes 11 de diciembre con La Ruleta Solidaria de Navidad. Una iniciativa con la que el centro premia la fidelidad de los conquenses, poniendo en juego 5.000 euros en premios directos, con los que hacer más llevaderas las compras propias de estas fechas.
En esta ocasión, La Ruleta de Navidad también tiene un carácter solidario y por eso incluye entre sus premios 100 vales de 10 euros cada uno que se destinarán a las familias de la ciudad a las que Cáritas Diocesana de Cuenca presta apoyo desde su Economato Emaús.
Se trata de un total de 1.000 euros que el Mirador donará a Cáritas Diocesana de Cuenca como parte de su política de apoyo a las entidades sin ánimo de lucro y a las organizaciones sociales de la ciudad. “Esta donación es un compromiso más que asume el Mirador con la sociedad conquense, porque después de casi 20 años generando empleo y riqueza en la ciudad nos sentimos parte activa de Cuenca”, ha asegurado Diego Varela, gerente del Centro Comercial Mirador de Cuenca, para quien además “este año tiene un significado especial por las grandes dificultades por las que han atravesado y atraviesan muchas familias de Cuenca”.
Por su parte, José Martín, director de Cáritas Diocesana de Cuenca, ha agradecido el gesto de solidaridad y compromiso del Centro Comercial Mirador ha tenido con la Entidad que él representa y ha asegurado coincidido en que “en esta Campaña de Navidad, Cáritas quiere estar aún más cerca que nunca del dolor de muchas familias sin recursos, de las personas migrantes que llegan a nuestra provincia o de las personas que están sin empleo y con escasas oportunidades”.
Gracias a esta colaboración, Cáritas Diocesana de Cuenca podrá sumar recursos para apoyar a más de 65 familias de la ciudad que tienen en el Economato Emaús un recurso básico para tener una alimentación digna y de calidad. Por último, Martín ha aprovechado la ocasión para invitar a toda la sociedad “a hacer esta Navidad mejor entre cada uno de nosotros, con cada gesto que seamos capaces de crear alegría, esperanza o confianza, porque nuestros gestos van a convertirse en el mejor regalo para los demás”.