El Casco Antiguo ha vuelto a congregar, como lleva haciendo de unos años a esta parte, a una multitud una vez finalizada la procesión del Hosanna.
Una vez que se ha encerrado el cortejo procesional resulta habitual quedarse por la zona de la Plaza Mayor a compartir charla con amigos y familiares en torno a un ‘botellín’. De forma progresiva, la costumbre ha ido ‘escalando’ hasta la zona de El Castillo cuyo entorno invita a mantener la tradición.
Los vecinos del Casco Antiguo han llamado la atención para evitar que los ‘coletazos’ de este nuevo ‘rito’ termine en forma de residuos, actos vandálicos y ruidos no deseados en la zona, como ha ocurrido otros años.
Otra de las zonas ‘calientes’ en estas fechas es San Miguel, abarrotada de gente sobre las 18:30 horas, tal y como se puede apreciar en las imágenes
El Castillo
San Miguel