La presidenta de la Junta de Personal de la Gerencia del Área Integrada (GAI) de Cuenca, Isabel Zafra, ha advertido que el actual ritmo de ingresos puede poner en riegso de saturaciónla Unidad de Cuidadanos Intensivos (UCI) del Hospital Virgen de la Luz.
Zafra ha puesto de relieve que «el tema más importante que se percibe con los ingresos es que además de los hospitalizados por COVID hay que contar con los no COVID. El problema es la saturación de la UCI. Teníamos, a día 3, siete por COVID con respiración asistida y tres que no son COVID con lo cual estamos ya con diez ingresos, una ocupación elevada. Como siempre, el problema es que se sature la UCI. Algunos con respiración están en una unidad intermedia en la que se les atiende». Etas mismas fuentes han previsado que «en principio, teníamos 12 camas en UCI y luego se abrieron cinco más, me parece, en cuidados intermedios. Aunque también hay que tener en cuenta que se adaptaron otros servicios».
Por otro lado, estas mismas fuentes han puesto de relieve el incremento del número de profesionales aislados por coronavirus. «Ahora tenemos 46 profesionales sanitarios aislados por COVID-19 en la Gerencia del Área Integrada (GAI) de Cuenca que engloba tanto Atención Primaria como Especializada. El pasado día 31 de diciembre había 32 y el 3 de enero había 46 entre los que se encuentran 12 enfermeros, 11 médicos residentes, facultativos de Primaria 10 y 4 técnicos, entre otros».
Zafra ha indicado que «las dos cosas son relevantes. Si se satura la UCi hay que buscar respiradores, y de eso tenemos. Pero el personal de UCI es más especializado en ese servicio. Si ese personal se contagia y no puede trabajar hay que recurrir a la bolsa de trabajo y las enfermeras que no están trabajando ha emigrado a otras zonas. Además, el nivel de especialización de determinados servicios es muy elevado y resulta muy complicado para personas que acaba de terminar la carrera».