Las adversidades meteorológicas no sólo han pasado factura a las procesiones sino que han tenido consecuencias muy negativas en la hostelería conquense. El presidente de la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo, José Manuel Abascal, no dua en afirmar que «ha sido la peor Semana Santa que se recuerda. Por mi experiencia, no recuerdo ninguna peor y preguntando a la gente más veterana, tampoco».
En esta ocasion, el ‘salvavidas’ ha sido la Semana de Música Religiosa (SMR) que ha garantizado visitantes al margen de la meteorología adversa. «La SMR nos ha salvado. Por suerte, aunque llueva los conciertos se llevan a cabo. Ese público se ha mantenido y ha contribuido a contener la ocupación en los alojamientos».
Una de las referencias negativas que ha salido a la luz estos días ha sido la Semana Santa del año 2013 en la que se cancelaron seis de nueve procesiones. «Aquella fue mala pero no fue tan mala como esta. Este año, además, se ha dado el caso que ha sido continuo el mal tiempo. Otras veces la meteorología falla al principio o en la parte final. En este caso, ha sido desde el Lunes Santo hasta el Domingo de Resurrección».
Abascal afirma que el descenso de la facturación para el sector hostelero puede rondar el 25% respecto a una Semana Santa habitual. «Aunque hay que tener en cuenta que hay muchas singularidades. No es lo mismo en un local céntrico que otro que no lo es, un apartamento puede estar ocupado todos los días y es un 100% aunque no es un dato general, depende tambiçen de los días porque no es lo mismo un Martes Santo que un Viernes Santo». Uno de los inconvenientes de estas jornadas ha sido las cancelaciones de reservas ya formalizadas. «Ha habido muchas. Se podría decir que han podido rondar entre el 11 y el 15%% en los días fuertes. Y, claro, una de las cosas que se han echado en falta han sido las reservas de última hora que este año paenas ha habido, Entre cancelaciones y ausencia de estas reservas el panorama ha sido muy desfavorable»