La empresa líder en España en redes de calor sostenibles llega a Cuenca con energía «ecológica y muy económica»

Rebi abastecerá de energía térmica para calefacción y agua caliente a la ciudad de Cuenca a partir de próximo invierno. La inversión alcanza los 40 millones de euros y supondrá la creación de 40 puestos de trabajo directos en un primer momento

Rebi-Recursos de la Biomasa, la empresa líder en España en diseño, construcción y mantenimiento de redes de calor con biomasa ya ha obtenido todas las licencias oportunas para comenzar a desarrollar su nuevo proyecto en la capital conquense.

La Red de Calor de Cuenca abastecerá de energía térmica procedente de la biomasa a las comunidades de vecinos, edificios públicos e industriales de la ciudad de Cuenca. Se trata de la segunda Red de Calor que Rebi construye en Castilla-La Mancha después de que el district heating de Guadalajara ya está funcionando y ampliando su número de usuarios a una velocidad de vértigo. Rebi va a iniciar la construcción de la mayor infraestructura sostenible de estas características en Cuenca a partir de energías renovables y de alta eficiencia con la biomasa como base, contribuyendo a la mejora del medio ambiente de la ciudad y de la economía local.

La Red tendrá su origen en una central térmica que estará ubicada en la travesía Avenida de Cruz Roja Española 11, D, al lado del concesionario de vehículos Ford. Desde ahí distribuirá la energía producida con astilla de madera a través de agua caliente a 90 grados por los tubos preaislados que recorrerán el subsuelo de la capital. El circuito, cerrado, conectará todos los edificios que deseen incorporar energía renovable, y el agua retornará fría de nuevo a la central, donde volverá a recoger energía.

Las calderas de gas y gasóleo de las instalaciones conectadas quedarán en stand-by. La sala de calderas del edificio incorporará un elemento nuevo llamado subestación que se encargará de hacer el trasvase de la energía desde el agua del circuito de la Red al agua del circuito de la comunidad.

Los conquenses que decidan utilizar la energía verde en lugar de su combustible fósil para calentarse no deberán pagar ninguna derrama ni hacer ningún desembolso inicial puesto que la conexión está bonificada al cien por cien, con una obra mínima en su sala de calderas, solo pagan por la energía que consumen, igual que ocurre en la Red de Guadalajara.

Una inversión de 40 millones de euros y 40 puestos de trabajo directos en un primer momento

El director ejecutivo de Rebi, Alberto Gómez, ha precisado que la red de calor «pretende abastecer al mayor número de vecinos de Cuenca con una energía renovable procedente fundamentalmente de la biomasa porque estamos con el Ayuntamiento de la capital de España con más recursos forestales de España. Es un recurso que complementaremos con un campo de concentradores solares». Estas mismas fuentes han destacado que «aprovechamos fuentes de calor que se estaban desperdiciando. Nos encontramos ante un proyecto muy dinámico y con una gran inversión. Estaremos en torno a los 40 millones de euros pero es una inversión que no va a parar porque según vaya creciendo la ciudad, la red crecerá con ella. Esperamos que sea un aliciente para que vengan más ciudadanos a vivir, a visitarla y más empresas a instalarse aquí puesto que vamos a proveer de una energía ecológica y muy económica».

Actualmente, Rebi tiene proyectos presentados en 20 ciudades de España y ya está funcionando en Valladolid, Soria, Aranda de Duero y Guadalajara.  «El principal cliente son las comunidades de vecinos con calefacción central. Y si es con gasóleo también porque se prevé una vida corta. Pero en otras ciudades hemos llegado a polígonos industriales y estamos dando servicio a empresas. A servicios públicos también, universidad, hospitales…todo aquello donde haya una necesidad de calor. Lo que estamos viendo en otros lugares es que todos los nuevos proyectos van asociados con la red de calor porque los propios vecinos son los que la requieren»

Alberto Gómez ha asegurado que «este invierno queremos empezar a dar servicio en Cuenca. Hemos comprado todos los equipos, tenemos todo listo. Las obras han empezado ya. Nuestro objetivo es empezar a hacer pruebas de instalaciones en octubre y empezar a dar servicio en noviembre». En cuanto a la generación de empleo, estas mismas fuentes han indicado que «según los propios datos de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha el número de empleos que se genera, por cada 10.000 viviendas que se suministren con biomasa, es de 160. En la fase de construcción crearemos unos 30 empleos directos más diez en la fase de explotación más los que se generen en el monte».

El nuevo hospital estará conectado a la red de calor

El vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, ha señalado que la Red de Calor’de Cuenca «es un proyecto que va a poner a Cuenca en la modernidad desde el punto de vista de la eficiencia energética y va a suponer un ahorro para las viviendas, empresas y edificios públicos que se adhieran» y que puede generar casi 200 puestos de trabajo en la ciudad de Cuenca.

Además, Martínez Guijarro ha explicado que el Ejecutivo regional quiere ser cliente de esta empresa. Por eso, ha dicho, «hemos planteado a Rebi que queremos conectar el nuevo hospital de Cuenca a esta red de calor cuando la empresa tenga diseñada esa parte del ramal». Tal y como ha recordado, se trata de uno de los compromisos del Gobierno de Castilla-La Mancha: que al Hospital de Cuenca se suministre la calefacción y el agua caliente con la biomasa que hay en los montes de la provincia de Cuenca.

Darío Dolz, alcalde de Cuenca, ha resaltado que «llevamos trabajando de forma callada mucho tiempo y hoy es la presentación oficial. Ya han iniciado obras, como las que se están desarrollando en la calle Santo Tomás donde se están instalando tuberías de ida y retorno de esta red de calor. La central estará muy cercana a esa ubicación, en el polígono que se ubica en la Avenida de la Cruz Roja, en la antigua carretera de Madrid y desde ahí se harán ramales para llegar a los vecinos que se quieran adherir a este nuevo sistema de calefacción».

El primer edil ha señalado que «se ha dejado fuera el Casco por la problemática adicional que tiene cada vez que abres una zanja pero tienen un estudio muy pormenorizado de los consumos que tiene la ciudad y si llegan a los techos que se proponen habrá una reducción anual de emisiones de 25.000 toneladas de CO2 a la atmósfera».