Hartazgo por la velocidad y la peligrosidad del tráfico en Los Tiradores: «Hay miedo a salir de casa»

Ambas asociaciones de vecinos reclaman una reordenación de la circulación de vehículos que atajan el camino por sus calles estrechas.

Uno de los principales problemas que denuncian desde los barrios de Tiradores Altos y Bajos es el tráfico por sus calles, algo que provoca «miedo» a los vecinos.

La presidenta del la Asociación de Vecinos de Tiradores Altos, Mercedes Fernández, sostiene que los residentes de las zonas de Villa Román, 4 y 3 han decidido pasar por la calle San Rafael para llegar al centro y acortar, en vez de circular por las calles anchas de la ciudad. «Esa vía es semi-peatonal y no soportan suficiente peso porque es muy antigua», critica.

Además, denuncia que los coches pasan «a mucha velocidad y casi han atropellado a algún vecino alguna vez». Dice que las calles son muy estrechas y los vehículos se pegan demasiado a las puertas de la viviendas, «la gente tiene miedo de salir de su casa». «Es como ponerte en medio de un autopista», critica Fernández.

La presidenta de los vecinos del barrio incide en que sus calles «son antiguas y estrechas», incluso no tienen pasos de cebra, como al final de la de San Rafael. Muchas de las vías son semi peatonales y no tienen aceras, por lo que los vecinos tienen «terror» cada vez que un coche pasa a gran velocidad. Insiste en que los vecinos «están muy hartos» porque, además, los niños «no pueden salir a la calle», «hay uno que casi le han atropellado dos veces ya», advierte Fernández.

Mercedes Fernández afirma que llevan con esta problemática años, desde la ampliación de la parte nueva de Cuenca. «Todo el mundo ha aprendido a venir por aquí para evitar semáforos y es horroroso», sostiene la presidenta de los vecinos. «Llamamos a Policía Local y no sube; te dejan un coche aparcado en una esquina cualquiera semanas».

Insiste en que necesitan cambios de dirección y una reordenación del tráfico cuanto antes «porque va a haber un problema gordo». Esperan una reunión pronto con el Ayuntamiento de la ciudad, pues la última, dice, fue hace más de un año. En el último pleno ordinario, el concejal de Urbanismo, Adrián Martínez, respondió a una pregunta de la formación Cuenca en Marcha sobre esta cuestión. Sostuvo que tenía pendiente reunirse con vecinos de este barrio, e insistió en que se estaban valorando algunas cuestiones «por los devenires que ha habido en la zona últimamente y si nos dan ciertas capacidades para generar plazas de estacionamiento».

Además, Fernández afirma que «tampoco saben nada» de la propuesta de aparcamiento que se aprobó en los Presupuestos Participativos de 2023.

Más vigilancia en las entradas al colegio

Por otra parte, la presidenta de la Asociación de Vecinos de Tiradores Bajos, Josefina Panadero, destaca el mismo problema con el tráfico por las calles de su barrio. Dice que el Ayuntamiento puso una señal «prohibido circular si no eres residente» en la pequeña plaza de la calle de los Azafranes para que solamente entraran coches de residentes. Sin embargo, critica que son muchos vehículos que parten desde Villa Román y la carretera de Valencia los que circulan por allí para atajar.

Otra de las solicitudes que piden es que pongan una señal para solo peatones en un callejón de la Puerta de Valencia por su estrechez. «Solo hay una señal que prohíbe circular, pero los coches se siguen metiendo», cuenta Panadero. «Lo que queremos es que pongan medios para controlar este tráfico, a través de cámaras o más vigilancia policial», reclama la presidenta vecinal. Sobre todo, pide que haya alguna patrulla a la hora de entrada del colegio del barrio. «La gente va a salir de su casa y tiene que mirar antes de poner el pie en la calle, porque te puede llevar un coche por delante», critica Panadero que dice, incluso, bajan por esa calle patinetes y bicicletas a gran velocidad.

La presidenta de Tiradores Bajos recuerda que lleva pidiendo una reunión con el Consistorio conquenses para solucionar este problema casi un año. «He llamado cuatro veces y siempre me dicen que me llamarán, pero no lo han hecho». Por eso, espera que más pronto que tarde se puedan juntar.