El presidente en funciones del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ), Rafael Mozo, ha señalado este lunes la «anomalía constitucional» que sufre el órgano judicial tras no haber sido renovado en los últimos cuatro años y medio por parte del poder legislativo. Mozo se ha pronunciado así en declaraciones a Voces de Cuenca después de inaugurar en la Fundación Antonio Pérez unas jornadas sobre el anormal funcionamiento de la Administración de Justicia en la que participa entre otros invitados, la presidenta del Consejo de Estado, Magdalena Valerio.
El mandato del CGPJ se encuentra caduco desde el 4 de diciembre del 2018 y desde entonces sus vocales desarrollan su labor en funciones. El conquense Rafael Mozo, natural de Arcos de la Sierra, accedió al cargo en sustitución de Carlos Lesmes, que formalizó su renuncia el pasado 10 de octubre.
Renovación «cuanto antes»
Tras la renuncia de Lesmes, tanto el Gobierno como la oposición, representada por el Partido Popular, aceptaron emprender nuevas negociaciones para garantizar un acuerdo de manera rápida. Sin embargo, finalmente se dieron por canceladas a raíz de la propuesta del Ejecutivo para reformar el delito de sedición. La no renovación de este órgano constitucional «afecta al normal funcionamiento de las instituciones: los efectos inmediatos que ocasiona a efectos prácticos se traduce en una falta de magistrados que se tenían que haber renovado ya», asevera Mozo a este medio. Quien también añade que «algunos se han jubilado y en otros casos los mandatos han caducado ya». A juicios del máximo responsable de los jueces, la situación está ha desembocado en un «perjuicio al normal funcionamiento de la Justicia». En esta línea el presidente en funciones del CGPJ ha instado a la renovación del Consejo «cuanto antes» tras la celebración de las Elecciones Generales, programadas para el 23 de julio: «En cuanto se constituyan las cámaras, se proceda a la renovación».
Mozo también ha recordado que «hay unos magistrados que solicitaron participar en el proceso de nombramiento en el mes de julio de 2018» y subraya que se trata de «unas expectativas que se han venido frustrando». El presidente en funciones del CGPJ también ha destacado que «las Cortes ya saben lo que tienen que hacer: renovar cuanto antes. Y prefiero que la renovación sea por parte del Congreso de los Diputados y el Senado, sin duda».
Sobre un acuerdo tras la celebración de las elecciones generales el próximo mes de julio, Mozo ha sentenciado que «lo veo deseable, necesario y cuanto antes». Otra de las paradojas que se producirá en ese mes será la jubilación del propio presidente del CGPJ, un motivo que agravará la situación que atraviesa la Administración de Justicia, cuya marcha de la adjudicatura dejará al Consejo con dieciséis miembros. Preguntado por esta cuestión, Mozo ha argumentado que «el mes de julio está muy próximo y las Cortes no se constituyen hasta mediados de agosto y por tanto, será por otras razones de peso, como el transcurso del tiempo y la situación en la que se encuentran estos órganos judiciales».
Necesidades de la Justicia en Cuenca
La despoblación que sufre la provincia de Cuenca, a juicio de Mozos, favorece una dispersión de los órganos judiciales. «Hay órganos judiciales en pueblos pequeños y quizá con la aprobación de la Ley de Eficiencia Organizativa en tanto en cuanto el tribunal, a distancia, hubiera podido solucionar bastantes problemas», ha asegurado Mozo.
Las principales carencias que presenta la geografía conquense en relación a la Justicia son el número de jueces en algunos partidos judiciales. «Muchos de ellos se encuentran vacantes y hay que recurrir a los sustitutos y por tanto sería deseable que se incremente la plantilla judicial, de hecho, el Consejo ya ha solicitado al Gobierno la creación de 293 unidades judiciales al mismo tiempo que ha pedido incrementar el número de plazas de jueces y fiscales para el próximo año hasta las 300. Lo que contribuiría, a razón de 30 jueces nuevo cada año, a restar las carencias de este sector. Al mismo tiempo, Mozo también identifica las mejoras que se deben acometer en las instalaciones judiciales para «mejorar los servicios prestados, por ejemplo, en los juzgados de Violencia de Género para evitar que en la misma sala esté la víctima y los acusados».
Huelga en Justicia
Sobre la huelga que afecta a los empleados de Justicia en nuestro país, el presidente del CGPJ ha señalado que la huelga se trata de un derecho constitucional, pero «va en detrimento del normal funcionamiento de la Justicia». Así mismo ha lamentado esta situación y espera que «haya acuerdos y consensos por una parte y por otra cuanto antes para resolver las desavenencias que haya para garantizar un funcionamiento normal». Así mismo, Mozo tampoco ha descartado que tanto jueces como fiscales vuelvan a convocar las interrupciones que han estado llevando a cabo en las últimas semanas tras haber sido desconvada por un acuerdo que se ha materializado en una subida salarial.
Más jornadas judiciales en Cuenca
Cuenca ya ha sido sede en varias ocasiones de cursos desarrollados por la Administración de Justicia, al igual que otras ciudades españolas. Al que contribuye a la mejor puesta en marcha del servicio de Formación Continua porque «salir de Madrid hacia ciudades pequeñas permite ahorrar costes y los jueces, que trabajamos en soledad, acudir a cursos como este de carácter académico va unido a la relación que tienen los jueces entre ellos. Cuando terminan las ponencias contarán con visitas guiadas en la Catedral y en la ciudad. Si están en Madrid, se dispersan y estas ciudades unen», ha explicado Rafael Mozo, quien personalmente ha elegido la capital conquense para estos actos formativos. Finalmente, el presidente en funciones del CGPJ ha apostillado que «la excelencia de los ponentes y las vistas de las ventanas al patrimonio de Cuenca vendrá bien a los jueces cuando mañana o pasado estén en su despacho».