El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca ha denunciado este jueves que el alcalde, Darío Dolz, «entrega el servicio de autobuses a cambio de salvar su legislatura», asegurando que el primer edil «actúa pensando únicamente en su supervivencia política, desentendiéndose de las consecuencias para el futuro de Cuenca».
En un comunicado remitido a los medios, el concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, Juan Guadalajara, cuestiona si el contrato de autobuses forma parte del presupuestos municipal o si, por el contrario, «se da por hecha su renovación», en referencia a una posible falta de transparencia o debate sobre este asunto.
Desde el PP critican también la gestión del contrato con la empresa concesionaria, a la que acusan de «imponer sus condiciones durante todo el proceso», en un contexto de «pasividad» por parte del equipo de Gobierno municipal. En este sentido, señalan la existencia de «numerosos incumplimientos» por parte de la empresa, como vehículos sin ITV, averías, retrasos y goteras. Además, recuerdan que una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha obligado al Ayuntamiento a pagar más de 600.000 euros, una cantidad que, advierten, podría aumentar con futuras reclamaciones hasta alcanzar el millón de euros.
El también diputado provincial del PP subraya que “fue el propio Darío Dolz quien firmó este contrato en 2012”, al que califican como “perjudicial desde su origen”. Según indican, en 2022 se prorrogó “de forma apresurada y de dudosa legalidad” con el objetivo de “salvar la imagen del equipo socialista de cara a las elecciones de 2023”.
Desde la formación popular afirman que han pasado dos años y medio “sin soluciones” y advierten de que aún queda la mitad de la legislatura “con un servicio hipotecado y los conquenses pagando las consecuencias”. A su juicio, esta situación refleja “un gobierno agotado, sin capacidad de gestión y cada vez más centrado en sus propios intereses que en los de la ciudadanía”.