El paso de cebra provisional que se había habilitado entre la calle José Cobo y la Plaza de la Hispanidad con motivo de las obras de reparación de un colector se ha quedado encerrado en gran parte dentro del vallado de los trabajos, por lo que los peatones carecen ahora de un itinerario marcado y seguro, viéndose obligados a cruzar por en medio de la calzada. En muchos casos rozan o invaden la zona por la que circulan los vehículos.
Fuera del espacio restringido permanece el rebaje de la acera que se había habilitado también coyunturalmente y que marca el inicio del recorrido reservado para los viandantes, pero las franjas horizontales amarillas pegadas al asfalto con las que continuaba son ahora inaccesibles salvo en su tramo final.
En el segundo paso de peatones provisionales (el que parte ya de la antigua Parada de los Taxis) el espacio permanece expedito y es totalmente transitable sin obstáculos, pero la mayoría de las franjas amarillas se han borrado o desparecido por el desgaste, lo que dificulta su identificación por parte de conductores y transeúntes.
Estas obras comenzaron el 9 de septiembre a raíz del hundimiento de parte del vial y la amenaza de colapso de esta zona, en cuyo subsuelo hay un colector y un refugio antiaéreo de la Guerra Civil que llega al Cerrillo de San Roque. El 23 de septiembre se cortó totalmente el paso del tráfico y se diseñó un recorrido alternativo para la circulación, de modo que los vehículos que van en sentido Puerta de Valencia tienen que dirigirse por la calle Ramón y Cajal, mientras que los que vienen desde Aguirre hacia Cuatro Caminos son desviados por la vía peatonal de Plaza de la Hispanidad y parte de Carretería.
El presupuesto de la actuación se cifró en 304.000 euros y el plazo de ejecución inicial se marcó en tres meses. A inicios de octubre, el Ayuntamiento preveía que el corte de tráfico se extendiera durante aproximadamente un mes y medio, un horizonte temporal que ya se acaba de cumplir sin que haya de momento fecha para la reapertura de la circulación.