El Parque Científico y Tecnológico impulsado por la Diputación Provincial contará con un centro de investigación para la obtención de hidrógeno a partir de residuos agrícolas y forestales. Las instalaciones supondrán un inversión cercana a los 3,5 millones de euros y estará vinculado al Centro Nacional del Hidrógeno, ubicado en Puertollano.
El presidente de la institución provincial, Álvaro Martínez Chana, ha precisado este miércoles por la mañana que se trata de un proyecto con el que se venía trabajando junto al Gobierno y la Universidad regional. «Vamos poniendo las piezas del Parque Científico y Tecnológico y ayer se hacía ese anuncio para la creación y la construcción de un Centro Experimental del Hidrógeno a partir de residuos agrícolas y forestales. Este centro será una pata más en el Parque Científico y Tecnológico. Va a contar con un presupuesto de 3,5 millones de euros financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y la Junta de Comunidades; en un 60% y 40% respectivamente».
Martínez Chana ha indicado que el proyecto va a estar liderado por el Centro Nacional del Hidrógeno «y en él vamos a participar la Diputación Provincial, la Junta de Comunidades y la UCLM. Es un plus para ese Parque Científico y Tecnológico para el cual disponer de este centro, con lo que tiene el hidrógeno de revolución verde, a nosotros nos da muchas más garantías para poder atraer empresas que estén involucradas en este sector».
La consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, avanzaba este martes la puesta e marcha de un proyecto destinado a la producción de energía e hidrógeno verde a partir de residuos agroindustriales denominado ‘Acciones estratégicas basadas en el hidrógeno para transformar el paradigma energético actual y minimizar la emisión de gases de efecto invernadero’ en el que participará la Diputación Provincial de Cuenca.
Generar energías limpias a partir de residuos
En cuanto a los objetivos, Blanca Fernández destacaba que “lo que pretendemos con este ambicioso proyecto es construir una planta de valorización de residuos agroforestales y agroindustriales; producir hidrógeno (H2) a partir de energías renovables; capturar corrientes de dióxido de carbono (CO2) de procesos de tratamientos de residuos y desarrollar sistemas de pilas de combustible de alta temperatura para la conversión electroquímica del hidrógeno y metano (CH4), entre otras acciones”.
“Es decir, un proyecto de innovación absoluta y enfocado a la sostenibilidad medioambiental, a la eficiencia energética y a la apuesta por nuevas fórmulas para obtener energía más económica, más barata, más sostenible, frente a esta crisis que ya llevamos aguantando un tiempo y que ahora está más agudizada”, ha dicho Blanca Fernández. Este proyecto tendrá un plazo de ejecución hasta 2024 y cuenta con una inversión de diez millones de euros, de los que 6.420.000 euros serán aportados por el Ministerio y 3.580.000 por el Gobierno de Castilla-La Mancha.
