El padre del acusado de acabar con la vida de su madre quemándola viva en la localidad de Garcinarro sospechaba que su hijo era el autor del crimen. Así se extrae de las declaraciones que realizó antes de fallecer y que han sido leídas durante esta primera jornada del juicio que acoge la Audiencia Provincial de Cuenca.
El padre, S.M.O, dio testimonio de que creía sinceramente que su hijo había podido matar a su madre, pero que al no estar presente en el momento de los hechos no lo podía asegurar. Además, relató a las autoridades que su hijo tenía un problema de alcoholismo y que tenía un comportamiento violento, tal y como han confirmado la hija y la mujer del acusado en sus declaraciones.
S.M.O no quiso presentar una denuncia contra su hijo, ni reclamarle la indemnización que pudiera corresponderle por los daños y perjuicios sufridos. Asimismo, rechazó que se adoptara una orden de alejamiento porque su hijo “no tiene a dónde ir”.
Según su relato, el día del suceso se marchó de la casa familiar a primera hora de la mañana y volvió sobre las 14:00 horas, cuando encontró los restos de la víctima, que no pudo identificar en un primer momento. En el inmueble se encontraba el acusado, que ante sus preguntas, negó conocer el paradero de la víctima.
Respecto al estado de su esposa, el padre del procesado indicó que la mujer sufría las secuelas de una intervención médica, y que desde hacía unos diez años había sufrido un gran cambio, pasando de ser una persona activa a no salir del domicilio ni participar de las tareas del hogar, pero subrayó que “no tenía valor” para suicidarse. “Nunca lo hubiera hecho”, afirmó, en contraste con las declaraciones que ha realizado el acusado, que ha defendido que su madre había manifestado tendencias suicidas.
Además del padre, la hija y la mujer del acusado, también han prestado declaración en esta primera jornada del juicio diversos testigos, vecinos de Garcinarro, que han acreditado la versión de S.M.O de que durante la mañana del día en que se produjo el suceso él no se encontraba en la casa.
