El Ayuntamiento fija un aforo de 50 personas en la zona de la ermita de San Julián

Las autoridades locales piden responsabilidad, evitar desplazamientos , aglomeraciones y tener en cuenta que el 'Escalerón' será de bajada y el aparcamiento estará restringido.

El Ayuntamiento de Cuenca ha vuelto a apelar a la responsabilidad de la ciudadanía de cara a la festividad de San Julián, instando a evitar desplazamientos y, en su caso, aglomeraciones. En cualquier caso, para quienes pese a este llamamiento decidan acudir a la zona de la Ermita el dispositivo de seguridad que se pondrá en marcha ha establecido un aforo de 50 personas y un tiempo máximo de estancia desde los accesos de dos horas; además, el ‘Escalerón’ será sólo de bajada para evitar aglomeraciones y el parking frente a estas escaleras rocosas estará restringido.

Así se ha determinado en la reunión que se ha celebrado este miércoles por parte del Ayuntamiento de Cuenca y la Subdelegación del Gobierno para organizar la coordinación entre Policía Local y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que ha estado presidida por el subdelegado del Gobierno, Juan Rodríguez Cantos, y por la concejala de Coordinación Institucional y Policía, Saray Portillo.

En ella se ha indicado también que los controles que llevarán a cabo estos cuerpos, en los que también participará Protección Civil, se establecerán tanto en el entorno de la ermita como en los accesos a la zona.  Asimismo, se vigilarán otras zonas que la ciudadanía, especialmente los jóvenes, acostumbran a frecuentar en este día. En este punto se ha instado a la responsabilidad de padres y tutores de menores para que les insistan en que se han suspendido todas las celebraciones y en la complicada situación sanitaria actual.

La edil Saray Portillo ha señalado que “insistimos en pedir mucha responsabilidad y evitar desplazamientos y aglomeraciones, pues estamos en un nivel 3 reforzado que implica numerosas restricciones dada la grave situación sanitaria. Tenemos que pensar en las personas que están sufriendo esta enfermedad, muchos de ellos ingresados, y en esforzarnos para que no colapse el sistema sanitario. Pero también en que cuanto más dure esta situación, más sufrirá sus efectos la economía, y ya son muchas las personas que lo están pasando mal por ejemplo con sus negocios cerrados o inmersos en un ERTE”.