El Ayuntamiento de Cuenca va a actualizar el callejero fiscal para adaptarlo a “la nueva realidad urbanística y comercial”. Así consta en el informe técnico sobre la necesidad de contratar un servicio de asistencia para llevar a cabo la actualización, que se realizará mediante licitación pública. Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el 20 de junio para presentar sus ofertas en un contrato que tiene un valor estimado de unos 12.000 euros.
El callejero fiscal actual clasifica en hasta cinco categorías de calles el término municipal, a efectos de asignar diferentes coeficientes en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y otras tasas municipales. En términos prácticos, contribuye a definir cuánto ha de pagarse en algunos impuestos y tasas en función a la situación en la capital, que suele coincidir con su cercanía al centro. Por ejemplo, el IAE establece una cuota mínima por un coeficiente de situación que depende de la categoría de la calle en la que esté ubicado el local.
En el citado informe técnico se indica que en el callejero fiscal actual “figura un índice alfabético de las vías públicas del municipio con expresión de la categoría fiscal que corresponde a cada una de ellas”. Además, dispone que las vías que no aparecen señaladas “serán consideradas de manera provisional en la categoría que resulte de características similares”.
El contrato abarca “cuantas tareas de apoyo, ejecución, asesoramiento y asistencia técnica se consideren necesarios”. De forma específica, los trabajos a desarrollar tendrán unas condiciones para resolver el callejero fiscal aplicable al IAE. Y es que se solicita “un nuevo estudio de categoría de las calles y la consiguiente repercusión en los coeficientes de situación establecidos en la ordenanza fiscal del IAE, analizando e indicando las calles para las que, en su caso, se propongan cambios de categoría y los motivos del cambio”.
Dicho estudio deberá recoger datos urbanísticos (pavimentación y acerado), servicios (alumbrado y alcantarillado), comerciales (existencia de mayor o menor número de locales comerciales en la zona), valores catastrales y el valor medio de repercusión comercial. En caso de proponerse cambios, deberá indicarse la categoría que tenía antes y la propuesta de asignación.