El 21,8% de la renta bruta media de los hogares de Cuenca capital procede de las pensiones. Así consta en el Atlas de distribución de la renta de los hogares publicado por el Instituto Nacional de Estadística. Según la publicación del INE, la renta bruta media por persona en la capital en el año 2021 (último dato publicado) fue de 16.564 euros. De ellos, el 61,7% provenía de los salarios, el 21,8% de pensiones, el 7,12% de prestaciones -incuyendo las de desempleo- y el 9,36% restante de otras fuentes de ingresos que el INE no especifica.
El peso de los salarios en la renta de los hogares en Tarancón asciende al 66,7%, siendo de los diez municipios más poblados el que mayor porcentaje tiene. Las pensiones en Tarancón representan un 17,6%, mientras que el bruto medio es de 13.275 euros.
En Quintanar del Rey, tercera localidad más poblada de la provincia la renta bruta media es de 9.861 euros, con un peso del 57,7% por parte de los salarios y un 17,8% de las pensiones.
La distribución de los ingresos en los hogares conquenses se distribuye de la siguiente manera: el salario supone el 56,8%; las pensiones un 22,7%, las prestaciones por desempleo un 2,8%, otras prestaciones un 4,9% y otras fuentes de ingresos un 12,6%. No obstante, conviene tomar estos datos provinciales con precaución, puesto que el Instituto Nacional de Estadística no desglosa 78 de los 238 municipios conquenses, concretamente los menos poblados y donde el peso de las pensiones en los ingresos tiene una mayor importancia.
Los datos muestran una clara evolución en los últimos siete años en la distribución de los ingresos en los hogares de la provincia de Cuenca. El total de ingresos de media ha pasado de los 10.292 euros en el año 2015 a los 13.443 euros en 2021. Esto se debe principalmente al aumento de los salarios, que pasan de representar un 54,8% a un 56,8% del peso en los ingresos, es decir, una subida de dos puntos porcentuales.
Por el contrario las pensiones cada vez tienen menos peso en los ingresos de los conquenses. Han subido, sí, pero en menor proporción de lo que lo han hecho los salarios. Es por eso que si en el año 2015 suponían el 25% de los ingresos, en 2021 el porcentaje se sitúa en el 22,7%, lo que significa 2,3 puntos porcentuales menos.
Siempre según estos datos del Instituto Nacional de Estadística los apartados de prestaciones por desempleo, otras prestaciones y otras fuentes de ingreso han tenido cambios relativamente homologables al aumento de los ingresos, y por tanto su peso en la distribución ha tenido variaciones de carácter leve. La excepción a esta regla se encuentra en las prestaciones por desempleo, que subieron dos puntos en el peso de los ingresos de los hogares de Cuenca en el pandémico 2020.
