«De este curso espero que los alumnos estén orgullosos de estudiar aquí y vuelvan el año que viene»

Entrevista a Miguel Mula, director de la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla-La Mancha

Miguel Mula es el director de la recién creada Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla-La Mancha, que comienza este curso su andadura con la puesta en marcha del primer curso de la especialidad de interpretación. Mula recibe en la escuela a Voces de Cuenca para charlar sobre el curso que está a punto de comenzar y los proyectos de futuro a corto y medio plazo que contempla como director del centro.

¿Qué es la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla-La Mancha?

La verdad es que hay un gran desconocimiento, incluso entre los profesionales de la educación. Las ESAD son centros de nivel universitario que no pertenecen a la universidad sino a los gobiernos autonómicos. En nuestro caso es un centro en el que se estudia una titulación superior equivalente a grado universitario, la especialidad que impartimos es interpretación textual, teatro, y más adelante habrá también estudios de dirección de escena.

¿O sea que los estudios son totalmente equiparables a cualquier grado universitario y los estudiantes obtienen una titulación de igual categoría que, por ejemplo, los estudiantes de derecho o de humanidades?

Sí, es un grado. Hay una normativa europea que equiparó todas las enseñanzas artísticas a las universitarias que se conoce como los acuerdos de Pisa.

¿Los estudiantes que tienen acceso a esta escuela necesitan los mismos requisitos que para acceder a cualquier otro estudio universitario o hay diferencias?

Hay algunas diferencias. Para entrar aquí no hace falta la EVAU, hay que tener el Bachillerato acabado o la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años y es necesario superar una prueba específica de acceso, una prueba en la que se valoran las aptitudes para la interpretación.

“Para entrar aquí no hace falta la EVAU, hay que tener el Bachillerato acabado o la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años y es necesario superar una prueba específica de acceso”

Digamos que hay que preparar el acceso al centro.

Efectivamente. El viernes pasado hicimos las pruebas, en las que los aspirantes tienen que preparar un ejercicio de interpretación, con un texto que tienen que les damos y otro que traen ellos, luego también hay un ejercicio de comprensión de interpretación intelectual, hay una parte de movimiento del cuerpo y se barema la aptitud de los alumnos.

¿Qué asignaturas se imparten en estos estudios?

Son estudios de 4 años, organizados por créditos y hay que obtener un total de 60 créditos. Dentro de estos créditos hay dos tipos: unos que son de enseñanzas básicas, que son las más teóricas, como teoría del espectáculo, de las artes escénicas, y otros créditos más prácticos, como la interpretación textual o el trabajo con el cuerpo; también hay dicción y voz, hay historia del texto dramático, análisis de textos. Más adelante, en cursos posteriores, habrá asignaturas más específicas como lucha con armas en el escenario, tanto esgrima, como navajas, etc… para aplicarlas en las representaciones teatrales.

¿Comienzan sólo con primero o tienen más cursos?

Comenzamos con un único curso, primero, con un grupo doble que se desdoblaría y con un máximo de 24 alumnos.

¿Cómo ha sido la captación de alumnos? ¿Tienen mucha demanda estos estudios?

En principio tenemos 24 plazas y se van a cubrir muy justas, pero también es cierto que somos nuevos, no teníamos ni siquiera redes sociales (las hemos tenido que crear hace unos días) y nos ha ayudado la Real Escuela de Arte Dramático de Madrid compartiendo en sus redes nuestros anuncios. La parte de promoción ha sido todavía muy precaria y nos ha costado captar alumnos.

¿Cómo se han nutrido de profesorado y de dónde vienen los profesores?

Todavía no han sido nombrados. Como no había profesores del cuerpo de arte dramático en Castilla-La Mancha y se quería crear como grupo se ha creado una bolsa provisional de profesores especialistas y para ello se ha abierto un concurso de méritos en el que lo principal es haber trabajado como docente en nivel superior y la experiencia laboral en teatro. Los profesores tienen que ser graduados o licenciados en arte dramático.

“Se van a mezclar muchos perfiles, los alumnos tienen muchas procedencias”

¿Cuál es el perfil de los estudiantes? Porque todos los estudios universitarios deberían ser muy vocacionales pero, no nos engañemos, hay algunos que parecen más que otros y estos son un ejemplo.

Sí, eso le da un carácter especial a este centro. Se van a mezclar muchos perfiles, los alumnos tienen muchas procedencias. Más o menos la mitad vienen de 2º de Bachillerato, con lo cual son chicos que tienen esta vocación desde muy jóvenes. La otra mitad son de edades muy diferentes, con carreras terminadas o con carreras a medias e incluso hay aspirantes con 52 y 60 años respectivamente, así que hay una gran variedad y todos con formación anterior profesional o amateur en el mundo del teatro. No es como otros primeros cursos de otras carreras que son más homogéneos, aquí hay una gran variedad. Son alumnos muy vocacionales porque cuesta mucho abrirse camino en este mundo, son muy pocos los que realmente pueden vivir de ello y sin embargo no pueden dejarlo.

¿Hay otras salidas profesionales para estos alumnos?

Sí, por supuesto, la vocación principal de casi todos, al menos en esta especialidad de interpretación, es la de ser actores, pero luego pueden encontrar otros campos de interés como la dirección de escena y también un campo inmenso desde el punto de vista profesional en España que es el de los técnicos vinculados al cine, teatro y televisión. Técnicos de luces, de sonido, de escenografía, que son muy escasos en España porque no ha habido estudios específicos de estas materias. Unos estudios de formación profesional de grado medio o superior serían para nosotros un complemento fantástico porque muchos de nuestros alumnos podrían terminar trabajando en ello. El plan de estudios no está cerrado del todo, tenemos cerrados los dos primeros años, pero los dos últimos, que son los de especialización, están abiertos y tenemos que crear nosotros el plan en función de las necesidades sociales y del interés estético que nosotros vayamos pulsando. Antes hemos hablado de la necesidad de hacerse un nombre y para eso también cuenta una cierta especialización. Además, pueden buscar otras salidas profesionales a las que acceder por su titulación universitaria superior, hay maestros, filólogos, abogados, trabajando en las cosas más dispares.

“Hay plazas todavía y si viniera algún potencial alumno interesado todavía podría inscribirse”

¿Están cubiertas todas las plazas de alumnos? ¿En caso contrario se puede todavía inscribir más alumnos?

Hay plazas todavía y si viniera algún potencial alumno interesado todavía podría inscribirse. Yo tengo potestad para abrir un plazo extraordinario de inscripción y si hay gente interesada y plazas los aceptaríamos porque cuanta más gente tengamos mejor. Aunque lógicamente tendrían que hacer la prueba de acceso.

Empiezan con la especialidad de interpretación. ¿Más adelante se van a añadir más especialidades?

De momento, por cuestiones de espacio, podemos tener otra segunda especialidad, que será dirección y dramaturgia, que abarca muchos campos, y podría salir en dos o tres años dependiendo de cómo vayamos.

¿Tienen en mente este año o en posteriores involucrarse en la vida cultural de la ciudad abriendo al público sus actuaciones o actividades para que los ciudadanos de Cuenca puedan ver el trabajo que llevan a cabo los alumnos de esta escuela?

No puedo hablar todavía de lo que va a pasar este curso porque estamos empezando y una sola clase no da para grandes trabajos pero sí que los alumnos deben participar, y les animaremos a ellos, en distintas actividades que vayan surgiendo porque tanto se aprende de los estudios como de las cosas que se hacen fuera, aunque no se cobre por ello. Y luego, conforme vayamos creciendo, sin duda la escuela debe tener una relación importante con la vida cultural de la ciudad. La tendencia a la vanguardia que ha tenido Cuenca desde hace muchos años es un camino que conviene seguir y desde luego que habrá interacción. Mi intención es que la escuela entre en la ciudad de Cuenca.

Por último. ¿Qué espera de este curso?

Lo que es espero es que los alumnos que vengan este año deseen volver el año que viene y estén orgullosos de haber estado aquí este curso.