567 personas dieron positivo en coronavirus en la ciudad de Cuenca entre el 12 de octubre y el 25 del mismo mes. En apenas catorce días se han detectado más contagios que empadronados tienen -en conjunto- las pedanías de Nohales, La Melgosa, Tondos y Mohorte.
En la semana que comenzaba con el día de la Virgen del Pilar se diagnosticaron en Cuenca 235 casos de COVID-19. En la siguiente, en la que concluyó el pasado domingo, la cifra se elevó a a 332. La Consejería de Sanidad sigue revisando datos y es probable que el próximo viernes añada infecciones que no están incluidos en el listado que ha difundido hoy por lo que el cómputo final será mayor. Es la práctica habitual; de hecho las cantidades comunicadas son superiores a las que se recogían en la resolución de ayer por la que se elevaban a Nivel 3 las medidas especiales decretadas para la capital conquense.
El incremento semanal en la capital conquense se sitúa en un 41,2% sobre una base ya muy alta. La razón de tasa de crecimiento es del 1,41, reflejo de una importante aceleración.
Estos números, si se ponen en relación con la población total, suponen que la tasa acumulada durante los últimos 14 días en la capital conquense es de 1.036 casos por cada 100.000 habitantes. Ese, infecciones por cada 100.000 habitantes, es el índice de referencia para medir el impacto de la pandemia.
Quintuplica el umbral con el que la Organización Mundial de la Salud considera que la incidencia es muy alta en un territorio y duplica uno de los índices que establece la Comunidad de Madrid para confinar una zona básica de salud. Según los datos más reciente, actualmente no hay ningún municipio madrileño de más de 50.000 habitantes con una situación superior a la de Cuenca. El que peor situación presenta es Majadahonda, con 744,86 casos, y que desde el lunes tendrá todas sus zonas aisladas.
Las comparaciones, más que odiosas, son imperfectas porque no todas las comunidades autónomas ofrecen los datos con la misma periodicidad ni formato, pero se puede parangonar de manera muy aproximada gracias a las cifras de los portales de los propios gobiernos regionales. A partir de esos números se puede concluir que el municipio conquense tiene una incidencia acumulada superior a la de localidades españolas que han sido confinadas en las últimas semanas.
Las tres capitales aragonesas están cerradas perimetralmente desde el pasado miércoles por orden de su Gobierno autonómico. En ese momento, los datos a catorce días de Teruel (1.418 casos/100.000 habitantes) sí que eran más elevados que los de Cuenca pero no sucedía lo mismo con Zaragoza (543) y Huesca (1.003). El ejemplo oscense es especialmente interesante desde el punto de vista estadístico, porque tiene una población total casi idéntica que la nuestra, por lo que a la hora de trazar equiparaciones no hay sospecha de distorsión porque la muestra sea mucho más grande o pequeña.
Desde esta semana también están confinada Burgos y Aranda de Duero, que en las dos últimas semanas completas presentan respectivamente tasas de 908 y 772. En Castilla y León el gobierno autonómico confina y endurece las restricciones cuando hay más de 500 afectados por 100.000 habitantes en ese rango temporal y, además, el índice de positividad de las pruebas PCR supera el 10% y las UCI de la comunidad autónoma tienen una ocupación media superior al 35%.
Con esos criterios se decidió cerrar León y Palencia con algo más de medio millar de casos por una centena de millar de habitantes. En ambos casos, a pesar de las medidas adoptadas, la incidencia ha seguido subiendo hasta 904 y 824 respectivamente por lo que las autoridades autonómicas no descartan el confinamiento domiciliario.
En Castilla-La Mancha no se ofrecen de manera habituales datos provinciales o municipales del índice de positividad, pero según declaró la delegada de Sanidad, Mari Luz Fernández, a la cadena SER, en la semana del 12 al 18 de septiembre 16 de cada 100 pruebas PCR que se habían realizado en el Área de Salud de Cuenca habían resultado positivas, por lo también se cumpliría la segunda condición para el aislamiento. Una semana antes se rozaba el 10%.
En Asturias están cerradas perimetralmente sus tres ciudades principales a pesar de que los guarismos están a años luz de los reflejados en la ciudad de las Casas Colgadas. Oviedo presenta 257 contagios acumulados por cada 100.000 habitantes, Gijón 352 y Avilés 328.
Los 30.000 vecinos de Manacor no pueden salir ni entrar de su municipio desde el miércoles salvo por causas justificadas. Una prohibición que se extenderá desde dos semanas y que el Gobierno de Baleares implementó porque la localidad había alcanzado tasas de 458 casos por cada 100.000 habitantes. Casi la mitad que Cuenca pero el récord de las islas mediterráneas.
Son solo algunos ejemplos de una realidad que se extiende por más comunidades autónomas. Entre las principales de Castilla-La Mancha solamente Talavera de la Reina (1.191 casos/100.000 habitantes) presenta una incidencia más acusada que la ciudad conquense. Tampoco está confinada, la Junta mantiene en ella medidas de Nivel 3, en el que desde este jueves se encuadra Cuenca.