J.J.D. / A.A.
El fundador de Cuenca Nos Une (CNU), Isidoro Gómez Cavero, ha anunciado este viernes por la mañana la salida de esta agrupación de electores del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Cuenca, del que formaba parte junto al PSOE desde el inicio del actual mandato municipal, en junio de 2019.
Gómez Cavero ha calificado la decisión como » irrevocable» y pone a disposición del alcalde todas las competencias de las que disponían los concejales de su formación en virtud de acuerdo de gobierno con los socialistas. Hasta el momento Dámaso Matarranz era concejal de Mantenimiento Urbano (Servicio de Obras, Aguas y la Empresa Pública de Aguas), Nerea Sancho ostentaba la responsabilidad en Asesoría Jurídica, Patrimonio y Montes mientras que estaban pendientes de asignación las competencias que gestionaba César Sánchez antes de ser nombrado vicerrector de la UCLM: Promoción Empresarial y Empleo, Innovación y Nuevas Tecnologías. Además, el propio Gómez Cavero y Matarranz formaban parte de Junta Local de Gobierno.
La salida del Gobierno local se ha adoptado por una cuestión de «plazos» en el avance de proyectos para la ciudad, según el líder de CNU, quien han manifestado su voluntad de seguir apoyando al gobierno local que preside Darío Dolz pero, «de otra forma, para que cumplan con lo acordado» con mayor agilidad. Considera que, de esta manera, van a ser «más útiles» para la ciudad desde otra posición institucional con el fin de que se tarde menos en lograr avances. «Nuestro valor hoy, tal vez no antes, está en estar fuera para ayudar a este Ayuntamiento».
Ha agregado que «lo que ellos (en referencia al PSOE) con los suyos, por decirlo así, tampoco lo podemos conseguir nosotros desde dentro y de esta manera intentaremos ayudar». Es una cuestión, ha señalado, «de practicidad y utilidad, estoy convencido de que iba a ir mejor, también a ellos mismos».
Durante su intervención, el líder de CNU ha resaltado que «hemos cumplido en todo, hemos participado en todo…Somos responsables igual que el PSOE de lo bueno y de lo malo. No tengo quejas, pero es otro tiempo y creo que el Ayuntamiento ya está organizado».
A juicio del cabeza de la lista independiente «no hemos roto ni rompemos con el Ayuntamiento, en la ayuda que podemos ofrecer, pero no participamos en su gestión directamente, aunque a la larga sí lo haremos con nuestra influencia desde fuera, ya que tendrán que negociar y hablar las cosas con nosotros».
La formación ha registrado este mismo viernes en el Ayuntamiento el escrito de renuncia, que Gómez Cavero ha leído en una rueda de prensa junto a otros cuatro concejales de la corporación local: Dámaso Matarranz, Marta Tirado, Ana Isabel Payán y Jesús Alberto Pontones. Ha estado ausente la sexta concejala que completa el grupo municipal, Nerea Sancho, por incompatibilidad de horarios. Era la primera vez que CNU convocaba a los medios con ese formato desde que se constituyó el ejecutivo local.
Se acaba así el primer gobierno de coalición municipal de la actual etapa democrática en Cuenca, el que configuraron la primera y la segunda fuerza de las últimas elecciones municipales, PSOE y CNU con once y seis ediles respectivamente, cuatro por encima de los treces que marcan la frontera de la mayoría absoluta. La oposición la venían configurando el Partido Popular, con seis actas, y Ciudadanos y Cuenca, En Marcha! (Podemos-Equo), con una cada uno.
«Es una decisión pensada desde hace meses pero el momento era este, después de los presupuestos»
El fundador de CNU ha revelado que es una decisión que se iba rumiando meses pero que no habían querido anunciar ni tomar hasta que no estuvieran aprobados los presupuestos municipales, que recibieron la luz verde del pleno municipal el pasado martes. «Apoyamos el presupuesto porque votar en contra sería perjudicar en la ciudad, el equipo de gobierno no podría aplicar su forma de gestionar. Es una decisión pensada desde hace mucho tiempo, pero el momento era este, después de los presupuestos».
A partir de ahora, ha avanzado que «ahora el Ayuntamiento tendrá que pactar cada cosa y nosotros tendremos más libertad, podremos votar en contra en algunas». Para conseguir un acuerdo estable que implicase respaldo en todas las cuestiones esenciales habría que negociarlo.
Pacto con la Junta
Asimismo, «ha insistido en que nuestro pacto está hecho con la Junta pero hay unos plazos que deben cumplirse». En esa línea considera que «las intenciones y los hechos van bien» pero ha vuelto a plantear que la cuestión crítica es lapso de materialización de los proyectos beneficiosos para la ciudad desde la Administración autonómica.
«Si yo viera que la Junta no hace nada, no estaríamos aquí. Tengo una confianza plena en que van a cumplir su palabra. ¿Qué todo se haga? Pues a lo mejor no, pero a lo mejor vendrán cosas que puedan compensar las otras», ha asegurando señalando el impulsor de la agrupación de electores. «Yo tengo información que a lo mejor no tenéis vosotros e insisto en que la alianza de las tres administraciones y la disposición a poner cosas sobre la mesa son positivas, pero nuestra intención es que se convierta en realidades cuanto antes y ahí tenemos que apretar», ha respondido.
«Nuestra influencia es ayudar a todo lo positivo a Cuenca y apretarles para que lo hagan, si están unos, unos, y si están otros, otro. Más o menos es nuestro proyecto», ha señalado reiteradamente, recuperando el mismo mensaje que vertebró su campaña electoral, la de apoyar al partido que gobernase en Toledo y propiciar que Ayuntamiento y Junta fueran del mismo color.
«Nosotros tenemos que intentar que cumplan las cosas que han pactado con nosotros y en eso estamos. El pacto inicial es con Emiliano García-Page, que puso unos proyectos sobre la mesa, hay un compromiso, y ese compromiso en su tiempo se valorará, se verá cómo van las cosas, si están para cumplirse o no. No es tan fácil llegar y decir, ‘queremos las escaleras’ y las escaleras están puestas mañana, pero a lo mejor sí que está puesto el dinero. Los procedimientos burocráticos que existen en Cuenca son complicados. Valoraremos en su día los compromisos y veremos lo que hay», ha explicado.
Ha defendido que «no hacemos un rédito político para fastidiar y mañana salir nosotros, esa no ha sido nuestra intención nunca» ya que el objetivo es «ejercer el poder y posicionamiento que nos han dado los ciudadanos» para que la administración regional asegure inversiones de desarrollo para Cuenca. «Aunque los míos no lo entiendan, yo cumplo hasta el último momento. Me puedo equivocar o no, pero si yo he pactado algo lo cumplo, a buenas o a malas», ha remachado.
