Albaladejito muestra experiencias con drones para monitorizar terrenos agrícolas

El consejero de Agricultura destaca el "excepcional trabajo" del centro de Albaladejito en la investigación y desarrollo del sector

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha incrementado en un 7% su aportación para seguir impulsando la labor de investigación y desarrollo al servicio de la agricultura y la ganadería de la región. Así lo ha manifestado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, quien este jueves por la mañana ha participado en las jornadas de puertas abiertas del Centro de Investigación Agroforestal Albaladejito, donde ha comprobado los diferentes cultivos de ensayo y otras acciones, como los vuelos de control del terreno con drones.

El consejero ha mostrado su «orgullo» por el sector agrario, que está «tirando de la economía» poniendo de relieve «el esfuerzo diario de los agricultores, ganaderos y la gente del medio rural que construyen Castilla-La Mancha cada día».

“Y para que así siga siendo y sigamos creciendo, es necesario innovar, seguir avanzando en el desarrollo y hacerlo”, ha dicho, “de la mano del sector”. De ahí, la apuesta que se realiza desde el Ejecutivo castellanomanchego mediante los centros de investigación del Instituto Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario y Forestal de Castilla-La Mancha perteneciente a la Consejería, como es el de Albaladejito, desde el que se está haciendo un “trabajo excepcional”.

En declaraciones a los medios de comunicación, Martínez Arroyo se ha referido «al incremento en un 17 por ciento del cultivo del girasol en la región en comparación con la campaña pasada. Se trata de 25.000 hectáreas más, habiéndose alcanzado un total de 180.000 en toda la Comunidad. Esto ha sido posible gracias a la que la UE ha permitido, por la crisis derivada de la guerra de Ucrania, la posibilidad de usar los terrenos en barbecho para este fin».

Además, sobre la mesa se encuentra también estudiar la flexibilización de la rotación de los cultivos para que deje de ser obligatoria en la próxima campaña. Esto, ha informado Martínez Arroyo, “posibilitaría que se sembrara más trigo y más cebada, lo que repercutiría en mayores ingresos para las explotaciones y más actividad en medio rural; a nivel global, serviría para ayudar en unos momentos difíciles debido a la guerra de Ucrania, con problemas de abastecimiento de cereales, sobre todo en países en vías de desarrollo, y debemos comprometernos desde la UE”, ha afirmado. Asimismo, se ha mostrado convencido de que “van a estar detrás todos nuestros agricultores y ganaderos”.

El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural ha visitado la finca experimental de 58 hectáreas en el centro de Albaladejito, en esta zona de Cuenca donde se desarrollan la mayor parte de los ensayos de campo asociados a las actividades de investigación y experimentación del centro, acompañado por su director, Luis de León; el director del IRIAF, Esteban García; el delegado de Agricultura en Cuenca, Joaquín Cuadrado; y el viceconsejero de Medio Rural, Agapito Portillo.