Una encuesta elaborada por NC Report y publicada por La Razón asegura que, de celebrarse ahora elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha, una hipotética alianza entre PP y Vox sumaría la mayoría absoluta y desalojaría al PSOE de Emiliano García-Page del Gobierno regional.
Según el sondeo, los socialistas se mantendrían como primera fuerza en votos, pero sus apoyos se rebajarían del 44,1% conseguido en las autonómicas de mayo de 2019 al 38,6%. En términos parlamentarios la merma sería de cuatro escaños, de 19 a 15, lo que supondría perder la mayoría absoluta, establecida en 17.
El Partido Popular lograría un 38,3% de los sufragios (+9,8%) y ampliaría su presencia en las Cortes regionales de los diez a los quince asientos, empatando así con el PSOE.
Los tres diputados restantes corresponderían a Vox, que con un 12% de los votos se estrenaría en el parlamento castellano-manchego y se convertirían en fuerza decisiva para decidir quién sería el inquilino del toledano Palacio de Fuensalida y gobernaría en la comunidad autónoma.
La encuesta deja más noticias, como la desaparición de Ciudadanos (que actualmente tiene cuatro actas) del parlamento regional al quedarse con 3,5% de los votos. Tampoco volvería a la cámara Unidas Podemos, socio del PSOE en la legislatura 2015-19, que sería cuarta fuerza con un 5,1 %.