De las más de 400 residencias socio-sanitarias de C-LM con las que cuenta Castilla-La Mancha, 131 tienen casos confirmados de positivo por COVID-19. En total hay 577 residentes confirmados como positivos y 271 fallecidos, según los datos facilitados por el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz.
El consejero explica que “hemos sectorizado aquellas residencias que tienen casos positivos en gran número y las llamamos Centros de Supervisión Sanitaria Continuada. Otras que denominamos Residencias en Transición, que albergan personas con sintomatología, pero que no han desarrollado la enfermedad y por último y siguen siendo la gran mayoría, las residencias de atención socio-sanitaria ordinaria.
Plan de Actuación
El consejero de Sanidad ha explicado que, ante el elevado número de personas mayores afectadas por los efectos de la Pandemia por Coronavirus, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha un Plan, que tiene como objetivo que las personas más vulnerables y frágiles, entre los que se encuentran los mayores, pero también discapacitados y personas con trastorno mental, sean atendidas en un dispositivo socio-sanitario integral que cubra todas sus necesidades.
Para ello se ha tenido en cuenta el perfil de los pacientes que se van a beneficiar de este dispositivo, los recursos materiales necesarios y las necesidades estructurales, así como el aprovechamiento de los servicios que ya existen en estos centros como la cocina, limpieza, y lavandería.
Las personas a las que van destinadas se dividen en:
1.- Personas ingresadas en el Hospital, que proceden de una Residencia y que no precisan asistencia hospitalaria pero no pueden volver a la residencia de origen porque la Residencia de origen no tiene posibilidad de prestarle asistencia o cuidado.
2.- Personas ingresadas en el Hospital que proceden de su domicilio, que no precisan asistencia hospitalaria pero que no pueden volver a su domicilio particular porque no reúne las condiciones necesarias de aislamiento o su situación familiar, personal, de cuidados ha cambiado y no tienen posibilidad de cuidados
3.- Personas que proceden de residencias, han sido atendidas en urgencias, que no precisan asistencia hospitalaria y no pueden volver a la residencia de origen.
4.- Personas vulnerables, frágiles que viven en su domicilio y por causa de esta pandemia, se han quedado solos o sus cuidadores están ingresados o han fallecido.
5.- Residentes que enferman por esta pandemia y que no precisan atención hospitalaria.
6.- Dispositivos socio-sanitarios que presenten algún tipo de alarma referida a problemas de personal, de material o de organización de aislamientos.
Acciones llevadas a cabo
Hasta la fecha, se han evaluado 100 dispositivos entre residencias de mayores, viviendas tuteladas, Centros de Atención a la discapacidad entre otros. Se ha establecido una sectorización en la distribución de residentes y se han evacuado a las personas que lo necesitaban. Se ha procedido a la desinfectación de estancias y se han apoyado con profesionales sanitarios en aquéllas que se ha estimado conveniente.
Además, se ha procedido a la intervención de dispositivos socio-sanitarios con el objetivo de dotarlos de profesionales sanitarios, material y todo lo necesario para acoger personas que lo necesiten de los perfiles que se han mencionado anteriormente:
Se ha procedido además a la formación a profesionales de Residencias en la Protección Individual y dotación de equipos de Protección Individual.
A ello se suma la creación y/o refuerzo de los equipos de valoración de Dispositivos socio-sanitarios existentes activados desde Atención Primaria.
Por último, se ha creado una Red de apoyo al Plan, en la que intervienen las Delegaciones Provinciales de Sanidad y Bienestar Social, la Dirección General de Salud Pública, la Dirección General de Planificación y Ordenación Sanitaria y la Gerencia del SESCAM con Coordinadores provinciales y un Coordinador Regional en el ámbito operativo.
Resultados
El consejero ha dado a conocer que se gestionan diariamente más de 100 situaciones diferentes diarias, individualizadas, con el objetivo de utilizar el recurso adecuado y adaptado a las necesidades de las personas.
Para finalizar, Fernández Sanz ha explicado que en este momento se dispone de alrededor de 300 plazas en dispositivos socio-sanitarios para cubrir las necesidades que vayan surgiendo en el día a día y se están preparando nuevos dispositivos bajo el criterio de prestar atención a las personas en los hospitales y en sus domicilios, evitando la movilidad al máximo y solo cuando se requiera a juicio de los profesionales, con el fin de enlentecer la transmisión comunitaria.