Dos ciudadanos con idénticas circunstancias e ingresos pueden pagar varios cientos de euros más o menos como consecuencia de las distintas deducciones personales y familiares que cada Comunidad Autónoma permite introducir en la declaración de la renta, advierte la Delegación de Castilla-La Mancha de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Por ejemplo, un padre con dos hijos, uno de cuatro años y otro que nació en 2021, con un salario de 25.000 euros, pagará en su declaración individual de este año 2.734 euros de IRPF si vive en Castilla-La Mancha, 699 euros más que si residiera en Castilla y León. Y es que en esta última comunidad existe una deducción de 1.010 euros por el nacimiento del primer hijo, 1.475 euros por el segundo y 2.352 euros por el tercero y sucesivos (a dividir entre los progenitores) cuando la base imponible total, menos el mínimo personal y familiar, no supere los 18.900 euros en tributación individual y los 31.500 euros en conjunta.
No es la única diferencia en deducciones personales y familiares. Hay muchas otras deducciones dirigidas a grupos vulnerables que solo existen en algunas comunidades autónomas, como:
- Deducción por viudedad, que solo se aplica ya en Cataluña y Extremadura.
- Deducción por madre trabajadora, únicamente en la Comunidad Valenciana.
- Deducción por cónyuge discapacitado, exclusiva de Andalucía y Cantabria.
- Deducción por menores de tres años, solo en Cantabria y La Rioja.
- Deducción por dos hijos o más, reconocida en Madrid y C. Valenciana.
En definitiva, OCU Castilla-La Mancha insiste «en la necesidad de una armonización fiscal para que todos los contribuyentes puedan beneficiarse de parecidas ventajas, independientemente de su lugar de residencia».