El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, ha trasladado su rotunda indignación con la decisión adoptada de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) de suspender la actividad docente durante quince días desde el 16 de marzo.
Durante la comparecencia realizada este jueves por la mañana, el máximo responsable regional ha declarado abiertamente que «me disgusta mucho la decisión que ha tomado el rector de la UCLM que ha sido en contra de la recomendación y la instrucción dada por la autoridad sanitaria. En la Universidad de Castilla-La Mancha no se ha detectado ningún caso. Ni hay ninguna recomendación epidemiológica que nos aconsejara ir por libre. Si estamos pidiendo a la ciudadanía que sea disciplinada con la autoridad sanitaria creo que la decisión adoptada hoy es el peor ejemplo de indisciplina con la autoridad sanitaria».
García-Page ha indicado que «me hubiese gustado mucho que la Universidad de Castilla-La Mancha se sometiera, como todos los ciudadanos, a lo dictaminado por la Consejería de Sanidad y por la Dirección General de Salud Pública. No comparto. Una cosa es la autonomía y otra cosa es ir por libre. Hubiera esperado una llamada personal al presidente de la Comunidad Autónoma y que se cumpliera con la isntrucción dada por la Cosneejría de Sanidad. Lo siento y mucho». Estas mismas fuentes han resaltado las medidas «en centros universitarios donde el Ministerio ha determinado sensibilidad específica como puede ser Madrid, País Vasco o La Rioja. Pero el ejemplo al que está obligado el sistema universitario hoy ha brillado por su ausencia. Y si lo que está planteando la Universidad regional es que se puede enseñar por internet a lo mejor es modelo que puede aplicarse en la Comunidad Autónoma. No se imaginan lo que eso significa en ahorro económico para todos los ciudadanos».
Por último, el presidente regional ha planteado varias preguntas trasladando abiertas críticas al modelos de la UCLM. «¿Tienen esto que ver con la elecciones universitarias? orque aquí todo campo de experimentación y especulación es posible.¿Esto tiene que ver con que la mayroía de los profesores prefieren ahorrarse no tener que venir a dar clases, viniendo de Málaga, Valencia o Madrid? Porque algunos de los que han tomado la decisión no viven en Castilla-La Mancha. A lo mejor sería la hora de obligar a que los trabajadores de la UCLM vivieran en esta región y tuvieran la cabeza en Castilla-La Mancha».