El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha declarado este jueves que su posición es que “en marzo como muy tarde incluso no tendría que haber cuarentenas”. Así lo ha manifestado el presidente regional durante una entrevista en Castilla-La Mancha Media con motivo de la celebración del 40º aniversario de la aprobación del Estatuto de Autonomía.
“Creo que es una exageración”, ha proseguido García-Page, establecer “siete días de confinamiento salvo para el que tenga alguna complicación”. Del mismo modo, ha mostrado su preocupación por los “muchos trastornos en la economía española, en las empresas y dentro de la Administración Pública” que está propiciando este protocolo.
El asunto de las cuarentenas fue debatido por el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas en el último Consejo Interterritorial de Salud, que se reunió este miércoles. El debate ahora está en ver si se levantan o reducen las restricciones contra la COVID, dada la evolución positiva de la sexta ola en indicadores epidemiológicos y asistenciales.
La posición del presidente regional de Castilla-La Mancha respecto a la flexibilización de las cuarentenas se da por hecho en Navarra, donde su consejera de Salud cree que la Comisión de Salud Pública que se reúne este jueves tomará medidas al respecto tanto de los aislamientos de positivos como las cuarentenas de contactos estrechos no vacunados.
En la reunión, Madrid o Cataluña fueron más allá e incluso plantearon eliminar las cuarentenas escolares a partir del día 21 de febrero, así como quitar las mascarillas de las aulas.
