El presidente de Castilla-La Mancha y máximo dirigente de los socialistas en la comunidad, Emiliano García-Page, ha declarado este viernes que el líder independentista catalán Carles Puigdemont «tiene la intención de humillar al Estado todo lo que pueda» mientras que Esquerra Republicana presenta «una posición más moderada».
En esa línea ha indicado que «de Puigdemont te puedes esperar cualquier cosa» en relación a las dudas planteadas desde Junts sobre el acuerdo para investir presidente a Pedro Sánchez y la ley de amnistía. «Dijo que no iba a firmar nunca la declaración de independencia, le empezaron a insultar llamándole botifler y la acabó firmando», ha argumentado. Ha añadido que «lo que no podemos hacer bajo ningún concepto es transformar lo blanco en negro» porque «lo que hicieron fue un atropello constitucional de enorme gravedad que nos ha traído consecuencias de todo tipo y lo que buscan es volver a intentarlo».
Ha apuntado que «aunque es legítimo que quieran la independencia» no le es «que lo hagan de cualquier manera y saltándose el derecho y cuando se lo han saltado y les conviene, lo cambian».
El presidente castellanomanchego también ha declarado en Ciudad Real ante los medios al respecto que «no entra en la capacidad que tengan los políticos negociadores en dejarse humillar porque eso va en su propia dignifad» pero no ha dudado en que «aquí alguien va a terminar siendo botifler, uno u otro», en referencia a Pedro Sánchez y Carles Puigdemen, «para una parte de España o para el conjunto».
Page ha agregado que «lo que no se puede es humillar al país, porque de ahí vendrán enfermedades distintas».
Quita de deuda
Respecto a la quita de deuda ha admitido que «obviamente, se plantea como consecuencia de las negociaciones que se están llevando con el Gobierno catalán», pero que «en estas negociaciones hay cosas que son normales, que da igual quién las plantee o cómo se planteen porque son de uso cotidiano, no tendrían por qué levantar ningún tipo de disquisición y discusión ideológica».
Sobre ese tema ha defendido que «todos tenemos deuda, además abundante, y conviene que el conjunto del país haga un esfuerzo, de manera que el que se quite un 20%, lo que pasa es que tiene que ser a todas las autonomías». De hecho ha remarcado que «no es que tiene que ser, va ser, si no lo es a todas, no lo será a ninguna porque es lo que establece la legislación orgánica del Estado y la financiación de las comunidades autónomas».
«Si el Estado quiere perdonar un 20% de la deuda, esto en esta región son 2.200 millones de euros, se dice pronto, ue supone sobre todo, en el largo plazo, un ahorro de intereses superior a los 250 millones», ha concretado a la vez que ha expresado su deseo de que se convoque un Consejo de Política Fiscal y Financiera al respecto.
Sobre todo porque desde Castilla-La Mancha se plantearía un matiz sobre los porcentajes y el sistema. «El Estado tiene un baremo que fija las comunidades autónomas que están financiadas por encima de la media y aquellas que estamos financiadas por debajo de la media, por debajo de 100 o por encima de 100.Cataluña, que lo está reclamando, está sobrefinanciada, tiene deuda, y es bueno que todo el mundo plantee quitar deuda, hasta ahí vale, porque eso siempre aligera la carga de la mochila, pero la realidad es que está financiada por encima del 100%. Comunidades como la nuestra están financiadas al 94,8%, es decir, por debajo de la media, es decir, que si se quita un 20% al conjunto de las autonomías, entiendo que a la Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia y Castilla-La Mancha, que somos las cuatro autonomías objetivamente infrafinanciadas, tendremos que tener una quita algo mayor o al menos un trato para que sea justo, vamos ,porque así aplicado parece bien un 20% para todos, pero es que no todos partimos de la misma situación», ha razonado.