El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha exigido este miércoles al presidente regional, Emiliano García-Page, «que no vuelva a cerrar la hostelería ya que ha quedado demostrado que los bares y restaurantes son espacios seguros». Además ha recordado al ejecutivo socialista que «el sector sigue sin recibir las ayudas que necesita».
De esta forma se ha expresado el presidente de los populares en la región tras conocerse los diferentes cierres del sector hostelero que están teniendo lugar en varios puntos de la región, unos cierres que, a su juicio, siguen poniendo “en la picota” a los hosteleros y señalándolos como los responsables de la propagación del virus.
“Page tiene una obsesión enfermiza con la hostelería, la está machacando sin piedad y señalándola continuamente para que parezca que el aumento de la incidencia del virus es responsabilidad de los bares y restaurantes”, ha afirmado Núñez que ha asegurado que “se trata de uno de los colectivos más castigados por Page durante la pandemia”, probablemente debido a su beligerancia con un presidente “que no admite la crítica”.
Núñez ha insistido en que “cerrar la hostelería es una verdadera falta de respeto a un sector que está haciendo las cosas muy bien, que está peleando muchísimo por salir adelante, que se está adaptando a las circunstancias a la perfección y que solo recibe de su Gobierno Regional el desprecio más absoluto cerrando sus locales y no permitiendo que puedan ganarse la vida”.
«Parece que cerrar bares es la única medida que conoce»
El responsable de los populares en la región ha recordado que «hasta el día de hoy, la hostelería sigue sin recibir un céntimo de ayudas por parte del Gobierno Regional del PSOE», por lo que ha propuesto “que todo ese dinero del que Emiliano García-Page presume de tener guardado porque sobra se destine a una bajada generalizada de impuestos y a pagar las cuotas de autónomos de estos negocios que se dedica a cerrar”.
Núñez ha reseñado la afición que está adquiriendo Page «por cerrar bares en la región, que parece que es la única medida que conoce ya que, ni ha aumentado el ritmo de vacunación, ni ha realizado cribados masivos entre la población para detectar el virus, ni ha puesto a disposición de la pandemia nuevas infraestructuras sanitarias como es el caso del Hospital Universitario de Toledo».
Como conclusión, el líder del PP ha exigido a Page “más empatía” con un sector ya suficientemente castigado por la crisis económica y sanitaria y que busque vías de control del virus que no pasen por criminalizar a los bares y restaurantes que no son culpables del aumento de la incidencia.