El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, está tramitando la ayuda del bono social térmico cuya cuantía total es de 7.729.276 euros que se destinarán a las 89.245 personas beneficiarias de toda la región. Así lo ha explicado este viernes en rueda de prensa en la Delegación de la Junta de Guadalajara el consejero de Desarrollo Sostenible, Jose Luis Escudero, junto al director general de Agenda 2030 y Consumo, Ramón Lara; y el delegado provincial de la Consejería, José Luis Tenorio.
El ‘Bono Social Térmico’, como ha recordado el consejero, es un programa de ayudas para compensar los gastos térmicos ocasionados a los consumidores más vulnerables por el uso de la calefacción y el agua caliente o cocina. Se creó por Real Decreto-Ley 15/2018, de 5 de octubre, de medidas urgentes para la transición energética y la protección de los consumidores con el fin de complementar el ‘Bono Social Eléctrico’.
Como ha dicho Escudero, hasta ahora el pago lo venía abonando el Estado, pero en esta anualidad 2020, tal y como establece ese Decreto, se ha traspasado la gestión a las Comunidades Autónomas por lo que este es el primer año que el Gobierno de Castilla-La Mancha gestiona el pago de esta ayuda.
“Y lo hacemos a través de la Dirección General de Agenda 2030 y Consumo de la Consejería de Desarrollo Sostenible, que es el órgano gestor del pago y quien está trabajando ya en realizar todos los trámites oportunos para que la ayuda económica del bono social térmico llegue cuanto antes a las personas consumidoras más vulnerables de la región”, ha afirmado Escudero.
Así se realizará a través de un pago único para el ejercicio 2020 cuya tramitación se ha iniciado este viernes 30 de octubre, con el objetivo de poder recibir las ayudas antes de final de año.
En palabras del consejero, “hemos asumido la gestión de estas ayudas de forma diligente por nuestras competencias en materia de energía y consumo, especialmente las marcadas por la Ley del Estatuto de las Personas Consumidoras en Castilla-La Mancha, aprobada en 2019 por este Gobierno autonómico, con el objetivo de la protección y prevención frente a la vulnerabilidad energética, pero también instando a todas las personas consumidoras a asumir responsabilidad en la eficiencia y el ahorro energético en el hogar, así como en la utilización de recursos energéticos, sostenibles y renovables.
Características y condiciones para recibir las ayudas
La única condición para recibir estas ayudas es la de tener reconocido el ‘Bono Social Eléctrico’, trámite que realiza la persona directamente con la comercializadora. La cuantía de la ayuda a percibir se establece en función de la zona climática en la que reside y de su consideración de vulnerabilidad reconocida que corresponde al Ministerio de Transición Ecológica, a través de la Secretaría de Estado de Energía.
En Castilla-La Mancha hay un total de 89.245 personas beneficiarias del Bono Social Eléctrico a 31 de diciembre de 2019, por lo que los beneficiarios del Bono Social Térmico recibirán una notificación en su domicilio a partir de las Zonas Climáticas. Según los datos provenientes del Ministerio, de las 89.245 personas potenciales beneficiarias, 43.799 tienen la consideración de ‘vulnerable’ y 45.446 ‘vulnerable severo’. En la provincia de Guadalajara, en concreto, son 6.464 los beneficiarios, con 568.274,34 euros de ayuda.
Todas las provincias de la región tienen la consideración de zona climática D; y además zona climática E en algunas zonas de la provincia de Guadalajara como Molina de Aragón, Sigüenza y municipios colindantes, por lo que también se tiene en cuenta el ámbito territorial de las zonas más despobladas. Los interesados pueden consultar toda la información en este enlace del Portal de consumo de Castilla-La Mancha: http://consumo.castillalamancha.es/node/23798
Otros servicios de acompañamiento a consumidores vulnerables
Por otro lado, el responsable de Desarrollo Sostenible ha destacado la importante labor que se realiza desde los Servicios Provinciales de Consumo y las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMICs) de la región, “pues trabajan con el objetivo de asesorar y acercar al ciudadano todo tipo de información que pueda ser de ayuda respecto al programa de prevención de la pobreza energética, atención de consultas sobre bono social, actividades formativas y educativas, así como labores de asistencia técnica y acompañamiento a consumidores vulnerables en eficiencia energética”.
En este sentido, Castilla-La Mancha es una de las cuatro comunidades autónomas a nivel nacional que están participando en el proyecto ‘PICE Network’ o Red de Puntos de Información al Consumidor Energético, dentro del Programa Empleaverde de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, cuyo objetivo es mejorar la cualificación de profesionales de entidades públicas y privadas, con el fin de que puedan llevar a cabo labores de asesoramiento a la ciudadanía sobre una mejor gestión de la energía doméstica.
En Castilla-La Mancha han participado 15 profesionales de OMIC´s y Servicios de Consumo en el Curso de formación «Gestor energético social» de puntos de información al consumidor energético (PICE), de los cuales 6 son de la provincia de Guadalajara.
También ha recordado el Servicio de arbitraje de Consumo para la resolución extrajudicial de litigios en materia de pobreza energética. Así como el proyecto piloto que se ha puesto en marcha desde la Consejería, en colaboración con el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, en el que se entregarán a las familias monomarentales que sean seleccionadas por los Centros de la Mujer de la región, 45 kits de ahorro y eficiencia energética en el hogar para personas consumidoras vulnerables. Y, por último, se ha referido a la Guía de Eficiencia y Ahorro Energético en el Hogar presentada recientemente para informar a las personas consumidoras a realizar un uso eficiente y ahorrar en su factura.