Europa Press
Los sindicatos CCOO y UGT han reclamado este 1 de mayo, Día del Trabajo, «honestidad por encima de todo» a los empresarios de Castilla-La Mancha para afrontar la crisis del COVID-19, garantizando su apoyo a aquellos que la ejerzan con los trabajadores y señalando que se lucharán por quitar los «garbanzos negros» que no se esfuercen por salir juntos de esta situación de dificultad económica.
Así lo han expresado en una rueda de prensa telemática el secretario regional de CCOO, Paco de la Rosa, y Raúl Alguacil de la gestora de UGT en la región, en un primero de mayo «atípico, muy extraño, triste, pero no menos reivindicativo».
En la Comunidad autónoma, ambos líderes sindicales han advertido que estarán al lado sus trabajadores y que «si alguien pretende como en 2008 aprovechar para precarizar, despedir o reducir jornada, se perjudicará a sí mismo».
«Vamos a intentar que la Administración esté vigilante para que se eche una mano a quien se necesita», ha afirmado De la Rosa, confiando en que los empresarios «van a ser responsables y van a hacer las cosas bien».
Por eso, han trasladado a los trabajadores que los sindicatos estarán disponibles, por el momento en formato virtual, pero «muy pronto» tendrán «las puertas abiertas» para pelearse por sus derechos y para que no se queden «solos». «No estáis solos, la clase trabajadora en la gestión del COVID demostrará una vez más que es imprescindible para dibujar el futuro de Castilla-La Mancha, no daremos un solo paso atrás», han expresado.
«UGT y CCOO harán un esfuerzo» para que exista un «gran acuerdo en Castilla-La Mancha», que tiene un «tejido productivo es débil», y han señalado que les preocupa las microempresas de la región, que son «las más frágiles».
Por ello, han pedido al Gobierno regional que sea el «primero en tender la mano para salir entre todos de esta», y han asegurado que «cada euro público debe tener un cuño de calidad» dirigido al mantenimiento del empleo y a que las empresas no cierren sus puertas.
Así las cosas, el responsable de la gestora de UGT ha manifestado que se deben flexibilizar y prolongar los ERTES para «no perder tejido productivo», por lo que proponen al Gobierno regional proteger a los trabajadores, facilitar la conciliación laboral y completar el ingreso mínimo para las familias que no tienen ninguno.
Respecto a las previsiones del Gobierno en cuanto a la caída del PIB del 9,2% y de la tasa de paro en un 19%, De la Rosa ha afirmado que «lo vamos a pasar mal», pero no se llegará a los límites de los economistas. «Vamos a ser capaces de mantener la actividad, y que nos sean muchas las empresas que se pierden. Si conseguimos que haya suficientes empresas abiertas, conseguiremos un volumen de empleo suficiente. El dinero existe y la fluidez, no estamos ante un cataclismo financiero, pero hay que poner el motor el marcha».
Algualcil, por su parte, ha añadido que «no es una crisis económica ni financiera», por lo que el Gobierno «tiene que hacer el resto y apoyar a la clase trabajadora» y no «dejar a nadie sin protección».