El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha precisado este jueves que la moratoria que su Gobierno aplicará para la suspensión temporal de nuevas licencias a las macrogranjas ganaderas no implica su prohibición sino que supone una «pausa procesal» para abordar con «consenso y con «cabeza» esta materia. Una moratoria que ha sido aprobada en el parlamento autonómico dentro de la Ley de Medidas Tributarias, que ha salido adelante gracias a la mayoría del PSOE.
El presidente del Ejecutivo autonómico que indicado que «nosotros no vamos a prohibir las macrogranjas ni podemos hacerlo teniendo en cuenta que eso es un debate sobre qué es una macro y que no. Es muy complejo lo que estamos diciendo habida cuenta de los múltiples intereses y problemas que hay. Creo que es una forma de abordar con cabeza los problemas. Hay quien lo quiere hacer desde el populismo más barato. Lo que decimos es que están pasando demasiadas cosas en la normativa europea, en la normativa ambiental y en la sensibilidad social como para que hagamos una pequeña pausa procesal y lleguemos a consensos».
Por otro lado, ha invitado al ministro de Consumo, Alberto Garzón, a visitar las «empresas inmensas que tenemos aquí que son envidiadas en el mundo entero con miles de trabajadores a explicarles que su trabajo es de peor calidad, que el producto de esas grandes empresas son de peor calidad».