El 92,9% de los casos de Castilla-La Mancha corresponden a la variante delta

Según recuerda el Ministerio de Sanidad, supone un aumento de transmisibilidad respecto a otras anteriores y también una "disminución de la efectividad vacunal". Se apunta asimismo a un posible incremento en la gravedad.

Castilla-La Mancha era la única comunidad no uniprovincial española que no contaba con la tecnología suficiente para secuenciar las muestras de coronavirus y cribar cuáles correspondían a la variante delta, también conocida por la India porque fue en el gran país asiático donde se detectó por primera vez. Esa excepcionalidad se corrigió a mediados de septiembre y los datos que semanalmente publica el Ministerio de Sanidad con información remitida por las autonomías permiten ya dibujar con precisión y sin recurrir a suposiciones cuál es el contorno de la pandemia en el territorio castellano-manchego.

El informe difundido este lunes señala que el 92,9% de las muestras recogidas en Castilla-La Mancha y analizadas corresponden a casos de la variante delta. La hegemonía es indiscutible a pesar de que el porcentaje es el segundo más bajo de España (sólo supera el de Castilla y León, donde supone un 81,1%) y de que ha retrocedido respecto a la semana anterior, cuando representaba un 95,6%.

El predominio de delta es prácticamente absoluto en todas las comunidades y ciudades autónomas en la última semana para la que se dispone de datos tanto en muestreos aleatorios como en el total de casos secuenciados.

La información sobre la prevalencia de las distintas variantes se obtiene a partir de dos fuentes. Por un lado, se lleva a cabo la secuenciación del genoma que permite el análisis completo de todas las posibles mutaciones presentes y su asignación a un determinado linaje. Por otro, se realizan pruebas de cribado mediante PCR capaces de detectar una o varias mutaciones específicas que permiten hacer una identificación presuntiva de las variantes que comparten esa mutación o conjunto de mutaciones.

A lo largo de las últimas semanas el porcentaje de variantes diferentes a delta ha ido disminuyendo a niveles muy bajos de circulación y en el momento actual parece poco probable que las otras variantes consideradas VOC (variantes preocupantes, por sus siglas en interés) puedan recuperar una presencia importante. Por otra parte, el retraso en los datos provenientes de la secuenciación es cada vez menor. Por estos motivos, en esta actualización el único cribado por PCR incluido en el informe es el de la variante delta. No se especifican ya porcentajes de otras que fueron hegemónicas como alfa, la variante inglesa.

Características y síntomas

La variante delta, según recuerda el Ministerio de Sanidad, supone un aumento de transmisibilidad respecto a otras anteriores y también una «disminución de la efectividad vacunal». Se apunta asimismo a un posible incremento en la gravedad.

Tras su expansión inicial en la India se ha convertido en mayoritaria en Europa y a nivel global en el momento actual.

Según algunos estudios, como uno del King’s College de Londres, esta variante presenta además algunos síntomas específicos. «El síntoma número uno es el dolor de cabeza, seguido del dolor de garganta, la secreción nasal y la fiebre, en lugar de tradicionales síntomas como dificultad para respirar y pérdida del gusto».