El presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado este miércoles la creación de una unidad sanitaria para tratar los casos de COVID persistente. Este nuevo recurso de control y seguimiento tendrá su sede principal en Albacete, «que está especialmente preparada para esta situación», pero contará también «obviamente» con departamentos y servicios en todas las provincias de la comunidad autónoma.
Page ha calificado de «servicio indispensable» este tipo de unidades debido al alto número de pacientes que tras ser infectado por coronavirus mantienen meses después síntomas.
Respecto a la situación de la pandemia ha celebrado que en la última jornada no ha habido «ni un solo fallecido» y ha opinado que el mejor homenaje que se puede tributar a las víctimas mortales es la recuperación y reactivación de la región a niveles superiores al inicio de la gran crisis sanitaria.