El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha celebrado este miércoles las nuevas reglas del trasvase Tajo-Segura, que reducen de 38 hm3 a 27 hm3 el agua a trasvasar en situación de ‘normalidad’ en los embalses de cabecera. “Hoy podemos celebrar que por primera vez los que ponen recursos a las decisiones del Estado en materia del trasvase ya no somos los de Castilla-La Mancha”, ha subrayado el presidente regional.
García-Page ha destacado en este punto que “eso significa que va mejorando la situación, vamos ganando centímetro cúbico a centímetro cúbico. Vamos ganando terreno, camino, me gustaría decir vamos ganando cauce. Y es lo que estamos ganando, cauce, capacidad de gestionar el agua”.
“Agradezco mucho la decisión que ha tomado la vicepresidenta y el Gobierno central en su conjunto bajando notablemente, habrá más bajadas y tiene que haber más hasta que se arregle del todo. Tenemos paciencia infinita, lo que no tengo es tiempo. Pero quiero ver cómo de una manera o de otra se arregla un conflicto histórico que enfrenta a una parte de la España seca con otra parte de la España seca. Y esto es una broma en un país en donde hay tantas diferencias en tantas cosas”, ha sentenciado el presidente regional de Castilla-La Mancha.
Además, ha indicado que agradece “que por primera vez se empieza a poner un límite en la voracidad en la gestión del agua”, y ha reclamado “la voluntad de acuerdo con Murcia, Valencia, Andalucía y con quien quieran en el conjunto de España, para que podamos decir con acierto que el agua es de todos, porque eso lamentablemente nosotros no lo podíamos decir aunque pasara por aquí. Y ahora empieza a ser un poco más de todos”.