Este lunes, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha pedido a García Page la implementación en el próximo Consejo de Gobierno de “tres medidas concretas”: «Nuevas deducciones en el impuesto de la renta para los autónomos, aumentar un 10% la cuota familiar y personal en el impuesto de la renta y bajar el tramo autonómico del 9,5% al 9% y del 22,5% al 21%». Medidas que, como ha apuntado, ya se están llevando a cabo en los gobiernos de otras autonomías tales como Madrid, Galicia o Andalucía.
El presidente ha incidido en que esta reducción fiscal está dirigida al pequeño comercio y a los autónomos, para los que «ya lo estaban pasando mal antes de la pandemia». Además, Núñez ha propuesto que «se incluya una política de bonificaciones para los autónomos que se dieron de alta el 19, justo antes, con el fin de compensar las pérdidas»; así como para «el que ha comprado una participación autónoma en otra actividad o al que ha comprado acciones de una cooperativa».
Núñez ha aclarado que esta medida tiene como objetivo «poder liberal a estos negocios dela carga económica de la renta para estirarla a su negocio y a la economía familiar». Asimismo, el presidente ha apuntado que estas medidas podrían hacer que “las familias se ahorren entre 800 y 1000 euros al año».
Tras varias semanas visitando comercios de la región de diversa índole, el presidente del PP en Castilla-La Mancha subrayaba la bajada de la facturación de los comercios de proximidad; «han recuperado un 36% de la facturación con respecto al 2020, pero es que en ese año estábamos confinados», expresaba Núñez. Además, ha criticado el actual gobierno por «subir el precio de la luz, no bajar el IVA como habían prometido y haber subido el impuesto del diésel». El Presidente del PP en Cuenca, Benjamín Prieto, que también ha asistido al acto, ha recordado que «el pequeño comercio es el dinamizador de la economía local» y que constituye «la base de la economía».
