Emiliano García-Page ha anunciado que este martes el Gobierno de Castilla-La Mancha va «a reformular las instrucciones sanitarias» y va a permitir que abra el interior de bares y restaurantes en aquellos municipios que se encuentren en Nivel 3, como la ciudad de Cuenca.
El presidente autonómico, que ha anunciado la medida en el acto de conmemoración del V Centenario de la revuelta comunera que han acogido la Corte regionales, ha señalado que se establecerán limitaciones de aforo pero que sí se permitirá desarrollar la actividad en estos espacios. La decisión se ha tomado «tras escuchar a los sectores afectados», ha dicho Page, quien ha recordado que «Toledo está en ese Nivel como también estuvo Guadalajara y otras localidades en el pasado».
Un cambio de criterio que llegará para los hosteleros conquenses en la víspera del día en el que se agotaba la resolución que establecía por una duración inicial de diez días el Nivel 3 en la capital conquense.
La flexibilización de las medidas llega diez días después del último cambio reglamentario por parte de la Junta y en un contexto de «certidumbre en los efectos positivos de las vacunas», en palabras de Page. Para él, hay que ir «a una estrategia evolutiva» en la lucha contra la enfermedad también desde el punto de vista «social y económico».
En esa línea ha señalado que «aunque hay que considerarla y tener prudencia», la cuarta ola de la pandemia «no tiene nada que ver con la tercera».