La Policía Local ha reabierto este jueves los accesos al Paseo (o Parque) Fluvial y a las zonas recreativas de la ribera que permanecían cerradas desde el 19 de enero por el riesgo de desbordamiento por el deshielo y las lluvias y, de hecho, algunos tramos de estas zonas quedaron anegados.
El Ayuntamiento ha tomado la decisión por el descenso del caudal del río Júcar a su paso por la ciudad (29,63 metros cúbicos por segundo a las 14:00 horas de hoy, según los datos de la Confederación) y por las previsiones de que continúe la tendencia descendente desde picos que superaron los 50 m3/s.
La reapertura oficial y autorizada llega más tarde de la que de facto algunos comportamientos incívicos habían propiciado, ya que algunas de las cintas delimitadoras de las zonas restringidas se habían roto en diversos actos vandálicos y algunos ciudadanos se adentraban en las orillas sin respetar el veto marcado.