La patronal conquense destaca que la subida del Salario Mínimo contrasta con el descenso de la productividad

La Confederación destaca que la mayor subida del salario mínimo en Europa se da junto al descenso de la productividad, lo que incrementa la carga sobre las pymes

CEOE CEPYME Cuenca ha emitido un comunicado alertando sobre los efectos negativos de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en un contexto de caída de la productividad. Según la Confederación de Empresarios de Cuenca, la combinación de ambos factores ha elevado considerablemente los costes laborales, afectando especialmente a las pequeñas y medianas empresas (pymes).

En su informe, CEOE CEPYME Cuenca resalta que España ostenta el SMI más alto de Europa en relación con la productividad, lo que agrava la situación de las empresas. A pesar de que el país ha experimentado uno de los mayores incrementos del SMI en la Unión Europea, con un aumento del 45,1% desde 2018, la productividad ha descendido considerablemente, lo que coloca a España en una posición complicada a nivel empresarial.

La Confederación ha señalado que esta disparidad entre la subida de los salarios y la caída de la productividad tiene un impacto directo en las pymes, que cuentan con una mayor proporción de trabajadores con sueldos bajos. Según el informe del Servicio de Estudios de CEPYME, el esfuerzo adicional que las empresas más pequeñas deben hacer debido a la brecha entre salarios y productividad llega al 30%, un porcentaje significativo que dificulta la rentabilidad y la capacidad de inversión de las pymes.

Además, el informe subraya que el SMI ha aumentado a un ritmo mucho más rápido que las ventas del comercio minorista, lo que ha incrementado aún más las dificultades para los negocios con un solo establecimiento. La Confederación también advierte que esta situación puede minar la capacidad de las empresas para generar empleo y crecimiento económico.

CEOE CEPYME Cuenca concluye que es fundamental encontrar un equilibrio entre los salarios y la productividad para evitar que el elevado coste laboral siga afectando de manera tan significativa a las pequeñas empresas.