Un inspector de Urbanismo examinará el nuevo puente sobre el Júcar para decidir sobre su legalidad

La empresa promotora de esta construcción no presentó los documentos que la Gerencia Municipal de Urbanismo solicitó para determinar si es legal o no.

Un inspector de la Gerencia Municipal de Urbanismo volverá a visitar el estado de las obras de un nuevo puente en el río Júcar a su paso por San Antón para determinar si la construcción es legal o no. El proceso continúa su curso después de que el pasado mes de julio la formación Cuenca en Marcha-Unidas por Cuenca denunciara ante el SEPRONA esta infraestructura que carecía de autorización. Así lo ha señalado el concejal de Urbanismo, Adrián Martínez Vicente, en el último pleno ordinario celebrado el pasado lunes tras una pregunta del edil Pablo García.

Martínez Vicente hizo una exposición de la correlación de hechos sobre este procedimiento, el cual en septiembre se solicitó realizar pruebas de carga y levantar la suspensión cautelas dictada en agosto, y posteriormente, en octubre, solicitaron a la empresa promotora presentar el proyecto completo en un plazo de dos meses.

El edil de Urbanismo destaca que «hasta el momento», la compañía no ha presentado ningún tipo de documentación e informa de que el inspector de la Gerencia volverá a realizar una visitar para «comprobar el estado de la actuación e imponer un Expediente Sancionador Urbanística si procede», pero previamente debe emitir un informe técnico sobre los hechos. Ese expediente, señaló, determinará si el puente es legal o no.

El Decreto 4004/2024 sostiene que el Ayuntamiento constata, tras una inspección realizada el 19 de julio, que las obras carecían de licencia, procediéndose a una orden verbal de paralización al promotor «que fue incumplida según imágenes recibidas el 3 de agosto donde se advertía la colocación de planchas metálicas sobre la estructura».

En el decreto además se especifica que dicha estructura «carece tanto de los pertinentes permisos urbanísticos como de proyecto técnico realizado por un profesional, ya que la pasarela puede suponer un grave peligro para la seguridad de los usuarios de la misma, además de los posibles daños que pueda producir a la red municipal de saneamiento y la contaminación que pudiera ocasionar en el río Júcar», según informó Cuenca en Marcha en nota de prensa.