La calle opina: ¿qué se podría hacer con el actual edificio del Hospital Virgen de la Luz?

Ciudadanos de a pie se pronuncian sobre la utilidad que podría tener el viejo hospital cuando finalice la mudanza al Universitario. Entre las funciones más aclamadas están las medias y largas estancias sanitarias o la creación de un gran núcleo empresarial.

El Hospital Virgen de la Luz tiene los meses contados cuando se efectúe el traslado definitivo al Hospital Universitario recientemente inaugurado por los reyes de España. Se espera que comience en la Semana Santa de 2025 que se celebra a partir del lunes 17 de abril, aunque durante un tiempo tendrán que convivir activos los dos hospitales. Se prevé que a lo largo del verano esté trasladado un 90 por ciento.

Presidente y vicepresidente de Castilla-La Mancha, García-Page y Martínez Guijarro, se han pronunciado respectivamente sobre la posibilidad de construir vivienda social o derivar alguna Delegación del Gobierno regional. Ahora toca poner la grabadora en la calle. Ciudadanos de Cuenca han pensado en futuros usos que podrían tener las viejas instalaciones para ofrecer ideas a quienes gobiernan la ciudad y administran los presupuestos. Ciertamente, el edificio cuenta con el hándicap de la antigüedad (1964), pero no todas las ciudades tienen el privilegio de poder innovar acerca de un espacio tan grande como este, y se podría añadir céntrico, que va a quedar totalmente vacío o desprovisto de utilidad.

«Un hospital de enfermos psíquicos»

Eva María Martínez ha oído que se podría hacer allí una residencia de mayores y le parece una buena idea.

Incluso ha añadido que quizá sería conveniente acercar a una mejor zona de la ciudad a los enfermos psíquicos de la provincia, que están ubicados actualmente en las afueras, en el camino del Terminillo.

También ha pensado en otro colectivo que podría beneficiarse como la Asociación Síndrome de Down u otra similar.

«Albergue, ludoteca y comedor social»

Esther trabaja como vendedora de la ONCE. Ya tenía en mente aprovechar la mudanza para conferir al edificio un nuevo carácter social. Se le ocurre que puede convertirse en un albergue para las personas que no tienen hogar.

Pero también ha defendido que se hagan más ludotecas para los niños puesto que el edificio tiene muchas plantas o incluso montar un comedor social.

Sin embargo, no cree que haga falta el antiguo hospital para usos administrativos de las Delegaciones del Gobierno de Castilla-La Mancha.

«Se puede hacer desde una Sala de Congresos enorme hasta un hotel»

Ángel trabajó en el Hospital durante casi 17 años como celador, así que sabe lo que está entre manos, son muchas plantas y no conviene equivocarse en la decisión. «Pueden hacer desde una Sala de Congresos enorme, rehabilitándolo un poco antes que demolerlo, hasta un hotel», ha indicado. Piensa que es «demasiado grande» y convendría segmentarlo por funcionalidades. «Especialidades faltan muchísimas, así como médicos asignados a las mismas», ha reconocido desde la experiencia.

Por eso, ha defendido que se reforme para hacer algo que necesite mucho espacio o combinar varias cosas. Cree que «está bien dividido», y hasta podrían instalarse empresas y hacer un complejo empresarial más cercano. «Algo que atraiga la inversión, pero demolerlo lo último, eso sería una barbaridad», ha concluido.

«Sería bueno que lo mantuvieran para rehabilitación»

Ana y Jorge viven y trabajan en Motilla del Palancar, pasan por Cuenca por cuestiones burocráticas o sanitarias. Estaban al tanto de que se había inaugurado un nuevo Hospital Universitario, pero no que fueran a vaciar el Virgen de la Luz.

«Sería bueno que lo mantuvieran para rehabilitación o incluir nuevas especialidades», ha comentado Ana. En su opinión, estaría bien destinarlo a enfermos crónicos por causa de accidentes o que precisen una estancia mayor. «¡Que lo aprovechen de alguna manera!», ha enfatizado Jorge. Ambos se han mostrado de acuerdo en utilizar la infraestructura para ayudar a gente que lo necesite, ya que «solo hace falta un lavado de cara y darle una vuelta».

«Podría convertirse en un imponente centro empresarial»

Celestino Bermejo, de Jamones Bermejo, ha estado ingresado como paciente varias veces en el Hospital, pero además tiene una hija que trabaja de enfermera allí. «¡Se podrían hacer tantas cosas!», ha expresado con ilusión, «desde un complejo donde puedan quedarse los enfermos que necesitan más tiempo de recuperación hasta un centro social que sea útil el día de mañana». A su juicio, todo lo que se haga para ayudar a los enfermos es bueno y quiere evitar las veces en que el alta se precipita. «¡Te dicen vete y no estás bien!», ha bromeado, «ahora es cuando se puede poner solución a eso».

Por su pasado emprendedor también ha señalado que podría convertirse en un imponente centro de empresas, ya que hace falta inversión y empleo en la provincia. «Hay que atreverse, si lo dejan lo van a ocupar y luego es más difícil sacar a la gente de allí», ha vaticinado.

En resumen, son usos, todos ellos, que albergan esperanzas propias de grandes ciudades, pero es el momento de aspirar más alto en las pequeñas y aportar creatividad a la solución de problemas.