El Rebi Cuenca afronta este martes, 17 de diciembre, la jornada 14 de liga a partir de las 21:00 horas en El Sargal. Enfrente tendrá a un Impulse BM Guadalajara que llega con necesidades en la clasificación.
Los guadalajareños llegan al derbi regional como anteúltimos con 6 puntos y sin victorias en los últimos cinco partidos, que han completado con cuatro victorias y un empate. Un punto de diez posibles. El Rebi Cuenca, por su lado, es séptimo con 14 puntos y viene de cosechar un ‘tropiezo’ en forma de empate en casa ante el Villa de Aranda.
Sergio López, capitán del Rebi Cuenca, espera un encuentro complicado. «Hemos jugado ya contra ellos dos veces en pretemporada y las dos hemos perdido. Fueron partidos igualados. Van a venir motivadísimos porque están en una situación que no es extrema pero es complicada. Eso hace que el partido sea de máxima exigencia y que tengamos que estar al 100% para poder sacar un resultado positivo».
Errores en los lanzamientos y puntos en el casillero
En cuanto a los errores en ataque que están penalizando al equipo conquense, ha indicado que «respecto a los lanzamientos que no entran sólo queda aplaudir el trabajo de los compañeros. Cuando alquien falla ya sabe que lo ha hecho mal, es el primero que quiere hacerlo bien. Entrenamos lanzamientos todos los días al 100% independientemente de si han entrado o no en el partido anterior». El extremo reconoce que «en cuanto se fallan dos o tres lanzamientos y el rival se acerca en el marcador, todo afecta. No lanzas con la misma confianza y si tienes ese run run pues lo más probable es que sigas yendo para abajo. Si de algo nos tiene que servir este partido es que cuando tengamos una situación así, seguir trabajando».
Sergio López destaca la trayectoria mantenida por el equipo hasta la fecha. «La temporada arrancó con muchas incógnitas. Nadie daba un duro de que al final de la primera vuelta tuviéramos la posibilidad, si ganamos, de tener 16 puntos. La sensación tanto mía como del resto del equipo es que tenemos margen de mejora y eso nos hace ser optimistas. La tendencia es positiva, independientemente de que los lanzamientos entren o no. El juego del equipo y la defensa cada vez van a mejor y eso nos da ese plus para no perder las ganas de seguir entrenando al 100%».