La calle Princesa Zaida acoge desde el pasado mes de agosto La Borboletta, una panadería-dulcería que complementa la oferta tradicional con un amplio surtido de productos para necesidades especiales. Además, ha apostado de forma decidida por los productos conquenses y en sus estanterías es habitual encontrar género procedente de diferentes municipios de la provincia con la voluntad de ir ampliando. La prioridad es ofrecer un producto natural y, en buena parte de los casos, elaborado de manera artesanal.
Su propietaria Adriana Arias Gómez señala que «el local ha sido totalmente reformado por nosotros mismos ya que quería un diseño muy específico para la colocación del pan, que permita que se pueda ver en su totalidad, sin maltratarlo, y que cumpliera las mejores condiciones higiénicas. Hemos utilizado madera de la Fábrica de Maderas de Cuenca pues quiero invertir en Cuenca y provincia todo lo que pueda, aunque por falta de recursos he tenido que pedir determinados artículos fuera.»
La Borboletta ofrece pan de La Peraleja, Villar de Domingo García, Valera y Chapela. «También voy introducciendo otros hornos como son de Valverde del Júcar y el de Amanda. Traemos todas las variedades de cada uno de los hornos y trabajamos por encargo ante pedidos más específicos, como panes para hacer ajo arriero, gachas, hogazas integrales 100%…». Como producto estrella, en lo que al pan respecta, «tenemos la barra Borboletta, que está elaborada con masa madre, cocida en horno de leña y tiene cuatro picos, asemejando las alas de una mariposa. Este diseño hace que cueza mejor y es una delicia. Es un diseño propio que únicamente realizan el horno de la Peraleja para nosotros. Invitamos a los ‘locos’ por los picos que se animen a probarla».
En el apartado de la dulcería, ofrece al cliente productos elaborados diariamente por distintos obradores: Artesanas, Casamayor, Igualada, Amanda, Chapela, Navarro y el Obrador del Huéca «que elabora nuestras deliciosas mariposas de sabores, doble galleta bañada en chocolate con distintas cremas jugosas de sabores como mango, nata, chocolate, crema o irresistible café y caramelo, convirtiéndolas en un dulce espectacular tanto para regalar como para darnos un pequeño homenaje. Los dulces se hacen a diario, y eso el cliente lo nota y lo agradece».
«El trato al cliente, muy importante»
La propietaria señala que su intención es ofrecer también gran cantidad de productos a los clientes que tienen necesidades especiales como alergias, intolerancias, celiaquia, diabetes…. «Ya estamos elaborando diariamente bizcochos para algunos clientes que necesitan un cuidado especial, desde bizcochos sin lactosa, sin gluten, sin huevo, sin azúcar con sabores divertidos como pistacho, frutas del bosque, chocolate blanco… podemos montar el bizcocho que se necesite, pero para ese tipo de compras preferimos por encargo para ceñirnos a sus necesidades. También ofrezco productos veganos y vegetarianos pues cada vez son más los clientes con estas opciones alimenticias». En la parte de pastas secas, hay productos de Almagro, Borox, Toledo, San Clemente, Honrubia… «Tambien trabajo con la Clementina y sus productos de gran prestigio, vinos de San Clemente, mieles de la Cooperativa Natur Cuenca, huevos de Rujamar…. Y, por supuesto, la Borboletta esta abierta a contar con cualquier otro proveedor de la zona que ofrezca un producto de calidad».
Adriana resalta que «para mi el trato es muy importante, pues no solo se vende pan; el acto de ir a por una barra para la tercera edad puede suponer la única salida al día de esa persona, poder ofrecerle pan de calidad además de un trato amable y darle una sonrisa es realmente gratificante. La amabilidad, educación y el cariño es absolutamente necesario para una panadería de barrio. Además de creer en la economía circular, creo en el poder de las personas de ayudarnos entre nosotros, por ello La Borboletta es un espacio solidario colaborador con Down Cuenca, Fundación Ahuce (Asociación de Huesos de Cristal de España) y Bonamiko, asociación de animales, para esta última hemos donado una cesta para que su recaudacioín integramente vaya destinada a ellos».
El logotipo también es un diseño propio, es una mariposa con alas que son barras de pan «y el nombre, que muchos clientes nos lo preguntan, La Borboletta significa mariposa en portugués y gallego. Las dos tt es un guiño a mi hija que tiene una letra doble en su nombre Daniella y por otro lado, Barboleta signica polilla que va a la luz en Palmero, de la isla de la Palma, lugar bellísimo que significa el amor de forma personal».
Felicitación de Ceoe Cepyme Cuenca
Invierte en Cuenca ha felicitado y respaldado a Panadería y Dulcería La Borboletta por reinventar un negocio dedicado a la panadería en pleno centro de la capital conquense, en la calle Princesa Zaida 11. Así, en un local comercial que ya tenía una actividad relacionada con el mismo sector, ha aprovechado este espacio, ha acometido una importante reforma para hacerlo más atractivo y ha apostado por dar más producto y un gran servicio a los clientes abriendo de lunes a sábado de 7:00 a 15:00 horas.
El técnico de la Oficina de Atención al Inversor de Ceoe Cepyme Cuenca, Julián Sorando, ha conocido de primera mano este negocio y ha puesto a disposición de la emprendedora todo el apoyo técnico de la organización para consolidar este negocio. Del mismo modo, además de felicitar a su responsable por esta apuesta, ha destacado que el hecho de aprovechar un local comercial ya existente, dotándolo nuevamente de actividad cumple una de las metas fijadas por el proyecto Invierte en Cuenca.