Tras la extinción del incendio forestal del Valverdejo este martes por la tarde, más de una semana después de su detección, los alcaldes del propio municipio, Barchín del Hoyo y Piqueras del Castillo hacen una valoración sobre cómo ha afectado el fuego en cada término municipal. Las últimas cifras oficiales indican que ha habido al menos 2.000 hectáreas afectadas, aunque la cifra definitiva se conocerá una vez resuelto el expediente. Tampoco se sabe, de momento, cuál fue el origen del fuego.
Por ello, los tres ayuntamientos se van a reunir para pedir algún tipo de ayuda después de que el fuego arrasara parte de superficie forestal y se hayan destrozado los caminos. «En el incendio de 2019 no se pusieron todos los medios para arreglar los caminos como se debían, y seguimos estando en una situación desgraciadamente desagradable», dice el alcalde de Barchín del Hoyo, Víctor Santiago. Asimismo, el primer edil de Piqueras, Enrique Herreros, asegura que los camiones de extinción «no pudieron pasar por la situación de los caminos. Es necesario que haya buena comunicación para poder entrar y que vayan rápido las cosas».
También, quieren quieren reunirse para plantear un plan de actuación y valorar posibles líneas de actuaciones para mejorar las infraestructuras, así como «plantear medidas en el monte en cuanto a la reforestación con independencia de que sea publico o privado, porque al final el valor ambiental es el mismo», destaca el alcalde de Barchín.
Todos los alcaldes coinciden en que la parte más afectada ha sido la de Barchín, donde más superficie ha quemado el fuego ya que el aire se dirigía hacia este término municipal. «Después de cinco años, volver a repetir la historial al final da mucha impotencia», dice Víctor Santiago, aunque asegura que «dentro de lo que cabe, la gente se ha mantenido tranquila y todo el mudo ha hecho lo posible para ayudar en la medida de sus posibilidades y arrimar el hombro».
En el término de Barchín, Santiago señala que este incendio ha afectado a la zona que afectó el fuego en el incendio hace cinco años, «pero de forma muy relativa. Creo que al final lo que se ha quemado en este incendio ha sido superficie nueva, que no se quemó en el otro». Sin embargo, en la zona de Piqueras, el fuego sí que ha afectado a zonas que ya se quemaron en el anterior incendio de 2019, «y gracias a eso no fue a más ni se extendió mas deprisa», cuenta Herreros.
En Valverdejo, su alcaldesa, Vanesa Elvira, confirma que se ha quemado tanto parte de monte público del municipio como privado, pero que el fuego no ha afectado tanto como a Barchín. Admite que los primeros días del incendio estuvieron más preocupados, pero según pasaban los días ya había más normalidad entre los vecinos del pueblo, «la piscina ya la pudimos abrir y la gente estaba más tranquila».
Elvira señala que también van a intentar pedir la zona catastrófica en esos municipios tras el incendio, y particularmente «intentaremos que nos arreglen las instalaciones de la piscina municipal, ya que se han estropeado algunas cosas después de que pasaras los helicópteros a por agua».