La maqueta en madera del paso de la Santa Cena que el escultor e imaginero Federico Coullaut-Valera diseñó para la Semana Santa de Cuenca se expondrá y recibirá culto en la iglesia de San Pedro de la localidad leonesa de Ponferrada. El locutor berciano Luis del Olmo, hasta ahora propietario de la pieza, ha querido donarla a la parroquia donde fue bautizado, si bien la sede de ésta se encuentra actualmente en un templo distinto al edificio en el que él recibió el sacramento, que fue desmontado en los años 60 del siglo XX.
Aunque la obra ya se encuentra en su nueva ubicación, será el sábado 29 de junio cuando se desarrollé el acto oficial de entrega y la bendición, coincidiendo con la festividad de San Pedro y San Pablo. Las esculturas de Jesús y los apóstoles exhibirán en un soporte de madera obra de Juan M. Zamora, ebanista de Camponaraya (León), y cubierto dentro de una urna de vidrio suministrada por BierzoGlass, según ha informado Bierzo TV.
La historia de la pieza
El boceto -pasado posteriormente a madera- fue el último trabajo Coullaut-Valera hizo para la Semana Santa conquense. Su origen se remonta a finales de los 70 e inicios del 80 del siglo XX. Tras varios intentos fallidos en las décadas precedentes -como el inconcluso conjunto de Fausto Culebras- se retomó el empeño de restituir el añorado misterio, inexistente en la Pasión de Cuenca desde que en la Guerra Civil se destruyó el añorado conjunto de Luis Marco Pérez. En 1983, según relata José Miguel Carretero en su publicación sobre la historia del Cristo de la Agonía, la comisión permanente compuesta por Ayuntamiento y Junta de Cofradías empezó a trabajar en el encargo, mencionando expresamente que Coullaut-Valera será el encargado de ejecutarlo.
Sin embargo, tal como explica el mismo autor y señala también el historiador Julián Recuenco en su libro ‘Diez años después’, finalmente se convocó un concurso-subasta. Además del boceto del escultor madrileño, se presentaron proyectos firmados por Faustino Sanz Herranz, los hijos de Emilio Tudanca y Octavio Vicent, que fue el finalmente elegido en 1983. El 28 de marzo de 1985 su paso llegó a la Plaza Mayor de Cuenca y ese mismo año desfiló en la procesión de El Silencio del Miércoles Santo, de la que forma parte desde entonces.
Por una concatenación de casualidades y causalidades, la maqueta del paso fue adquirida por Luis del Olmo, célebre por su programa ‘Protagonistas’ que macó casi medio siglo de radio española en cadenas como Radio Nacional, COPE, Onda Cero y Punto Radio. El periodista evocaba estos días en los micrófonos de Onda Bierzo que descubrió la pieza en una visita al taller de Coullaut-Valera, a la que acudió invitado por Luis Sánchez Polack ‘Tip’. Aunque inicialmente el escultor rechazó vendérsela, unos años después accedió y se formalizó la transacción.
Desde entonces, salvo algún periodo excepcional, esta ‘Santa Cena’ de tamaño reducido ha estado en la vivienda que el veterano comunicador tiene en la localidad tarranconese de Roda de Bará, hasta que ha decidido legarla a su tierra natal tras recibir una petición al respecto.
Expuesta en Cuenca 1996
En marzo de 1996 las imágenes fueron trasladadas a Cuenca con motivo de la exposición organizada por la hermandad del Cristo de la Agonía en el Palacio Provincial para conmemorar el cincuentenario de su talla principal actual, obra también de Federico Coullaut-Valera. Desde la cofradía destacaron que fue una de las piezas mostradas que más expectación levantaron.
Otro boceto prácticamente idéntico y de la misma temática, pero en escayola, de Federico Coullaut-Valera se encuentra en Hellín (Albacete), adonde llegó en el marco de un gran acuerdo por el que la familia del artista donaba su archivo a la hermandad del Prendimiento. A partir de ese diseño en 2006 (17 años después de la muerte de Coullaut-Valera), el escultor José Vázquez Juncal talló un conjunto de la Santa Cena que actualmente desfila cada Jueves Santo en la localidad albaceteña. Una suerte de paso póstumo.
Un grande de la escultura española con cinco pasos en Cuenca
Federico Coullaut-Valera (Madrid, 1912-La Granja de San Ildefonso, 1989), sobrino nieto del escritor Juan Valera e hijo del escultor sevillano Lorenzo Coullaut Valera, es uno de los grandes nombres de la escultura española del siglo XX. En el ámbito profano o civil destacan obras como el monumento a Cervantes de la Plaza de España de Madrid, la Victoria Alada del edificio Metrópolis o la estatua de Pío Baroja del Retiro de la misma ciudad.
En el ámbito religioso, además de su retablo para la iglesia de la Universidad Pontificia de Comillas de Madrid, destacan sus pasos procesionales para las Semanas Santas de Hellín, Úbeda, Cartagena, Orihuela y Cuenca. Para la ciudad conquense talló el Ecce-Homo de San Miguel, el Cristo de la Agonía, la Soledad de San Agustín, Jesús con la Caña y La Oración en el Huerto de San Antón. Además, fue el autor de la cruz y las andas del Cristo de Marfil y se encargó de la restauración del Jesús Nazareno de Sisante que tallara La Roldana.