La puerta exterior de la iglesia de la Concepción Franciscana fue un regalo de la Cofradía de las Angustias

Debido a los daños provocados por el fuego, las puertas han tenido que ser retiradas. Eso sí, aún es pronto para conocer el alcance real de los desperfectos

La puerta exterior de la iglesia conventual de la Concepción Franciscana fue un regalo de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias al propio convento, tal y como ha explicado José Manuel Vela, secretario de la Cofradía.

Aunque, al no tener los registros en mano, no ha concretado cuándo se produjo este regalo, sí que ha confirmado que fue «hace varios años». Ahora, por culpa del incendio de este viernes, las puertas exteriores e interiores han debido ser retiradas.

Vela ha explicado que aunque todavía es pronto para una valoración exacta, los daños más evidentes en este edificio, declarado de Bien de Interés Cultural (BIC) en 2001 son los de la fachada y los de las puertas.

Todos estos elementos se han ennegrecido y, si bien no han llegado a calcinarse por completo, presentan claras quemaduras. En cuanto al interior, aunque no han llegado las llamas en su mayoría, sí lo han hecho el humo y el hollín, afectando sobre todo a la parte delantera y superiores de la nave, dejando caer cascotes de pintura sobre los bancos.

Para comprobar el estado del interior de esta iglesia se ha podido ver a Daniel León, arquitecto jefe de la Oficina Técnica del Consorcio de la ciudad de Cuenca.

Afortunadamente estos daños no han sido personales, pues las personas que se encontraban en el interior del templo y todas las monjas del convento han resultado ilesas. Además, la Cofradía de Las Angustias se ha puesto en contacto con las Madres Concepcionistas para confirmar su bienestar, así como para transmitirles su ánimo, apoyo e intención de colaboración.