La Diputación de Cuenca ha presentado los presupuestos para 2024 que asciende a cerca de 117 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 17% respecto a las cuentas del pasado año, lo que los convierten «en los más altos de la historia de la institución provincial centrados en las personas y manteniendo su fuerte carácter social».
Así lo han puesto de manifiesto durante la presentación el presidente, Álvaro Martínez Chana, y la vicepresidenta, Nuria Illana, quienes han destacado que «se trata de unos presupuestos equilibrados y saneados donde el capítulo de personal tan sólo supone el 23% de los mismos algo que pone de manifiesto la eficiencia de los recursos públicos».
Martínez Chana destacaba que con este presupuesto «se avanza en el objetivo de luchar contra la despoblación a través de acciones directas, como el proyecto Arraigo, inversiones indirectas, aquellas destinadas a mejorar la vida en nuestros municipios, y acciones extraordinarias destinadas a potenciar la instalación de empresas en la provincia».
En este sentido, ha subrayado «la puesta en marcha del primer Plan de Suelo Industrial de la provincia que tiene un presupuesto de 500.000 euros y que comenzará a actuar en las cuatro cabeceras de comarca, es decir, Cuenca, Tarancón, Motilla del Palancar y San Clemente, para dotarlas de suelo industrial disponible, sin cerrar la puerta a actuar en otras localidades donde pueda existir demanda».
En paralelo, se apuesta por una planificación energética «para garantizar los suministros tanto a las empresas ya existentes como a los nuevos proyectos que lleguen, dotado con más de 650.000 euros y que comenzará sus primeras acciones en Montalbo y Motilla del Palancar. En este sentido, el presidente ha recordado que siendo una provincia productora de energía renovable no se puede permitir que ningún proyecto empresarial se traslade por falta de potencia».
Y completando estas acciones extraordinarias, Martínez Chana ha señalado «la necesidad de contar con agua en una provincia donde cada vez es más escasa apostando por una gestión centralizada para lo que se ha presupuestado 1,2 millones y se ha presentado un proyecto de más de 28 millones al PERTE del Agua con fondos europeos para la digitalización de las redes de agua en los municipios».
Unos presupuestos que «consolidan el giro de la política provincial que comenzó al inicio de la pasada legislatura con un incremento del 40% en los presupuestos desde 2019 buscando que las cuentas sean útiles para las personas y los ayuntamientos con partidas que han crecido por encima del 100% en estos años como la Asistencia Técnica al Municipio o el Medio Ambiente, e impulsando las políticas activas de lucha contra la despoblación con un crecimiento del 75% en el área de Emprendimiento».
Por su parte, la vicepresidenta explicaba que «el crecimiento del presupuesto supone la consolidación de las líneas de ayudas por las que se apostó el pasado año ya que todas mantienen esos crecimientos o incluso vuelven a aumentar para el próximo año».
En esta línea, destacaba «la apuesta por el área de Atención Técnica a Entidades Locales donde se mantienen las apuestas por el empleo con la participación en los Planes de Empleo y los Talleres Recual, o el incremento de las ayudas para la contratación de personal en los Ayuntamientos y las Oficinas Técnicas Comarcales que pasan de 150.000 a 270.000 euros o nuevas líneas como las destinadas al control de las colonias felinas en los pueblos».
En cuanto a Turismo y Patrimonio, ha destacado «el incremento de un 62% del convenio con la Agrupación de Hostelería, la primera colaboración con la asociación de cocineros o el importante incremento en los parques de Segóbriga y Noheda que se sumará a un cambio en el modelo de gestión». En este sentido, y tras los buenos resultados obtenidos, ha señalado «el incremento de un 20% que tendrá el programa de Actuamos en Patrimonio para que pueda llegar a más pueblos y habitantes de la provincia».
En Cultura, Illana destacó «la consolidación del crecimiento del 40% del pasado año en las líneas de ayudas, a lo que se vuelve a sumar la apuesta por la Fundación Antonio Pérez cuya cuantía sube un 14% donde se impulsará la nueva sede de Tarancón». En nuevas líneas, ha apuntado «la puesta en marcha de ayudas dirigidas a consistorios para la organización de congresos dotada con 50.000 euros para apostar por este tipo de eventos».
En Servicios Sociales, la vicepresidenta destacaba «las dos grandes apuestas como son la conciliación familiar a la que se destinarán 525.000 euros y el servicio de comida a domicilio que cuenta con una inversión de siete millones en cuatro anualidades».
En cuanto a Deporte, señaló la puesta en marcha de cursos de monitores para que pueden desarrollar actividades en los pueblos con prácticas en el Albergue de Fuente Las Tablas, el incremento del 13% al deporte escolar, las ayudas para el deporte femenino o el equipamiento de gimnasios en los colegios, entre los puntos más destacados.
En Medio Ambiente, cuya partida sube un 22%, ponía en valor «las acciones para poner en marcha el cuarto contenedor en los pueblos, la inversión en la gestión de los biorresiduos o la adquisición de dos camiones que actuarán como puntos limpios móviles a la que se destinarán dos millones de euros».
Sobre la Prevención y Extinción de Incendios, Illana explicaba que, entre otras acciones, «se va a poner en marcha una nueva línea de ayudas para las Agrupaciones de Protección Civil para adquisición de material y dos millones de euros para dotar a los nuevos parques de bomberos de Priego y Cañete de equipamiento y vehículos». En este sentido, ha subrayado «la necesidad de hacer las cosas con orden para evitar que se puedan perder fondos y ha recordado que de forma paralela se está trabajando con el servicio para planificar el incremento de plantilla que se necesitará para atender las nuevas infraestructuras».
En materia de Obras, apuntaba a «un incremento del 50% en el convenio con la Guardia Civil para mejorar las casas cuartel de los pueblos en los dos últimos años y que los agentes permanezcan en los pueblos». También destacaba «el novedoso convenio con el obispado con 200.000 euros para rehabilitar las casas que están en desuso y ponerlas a disposición de los ayuntamientos que tengan un déficit de viviendas».
