Las Asociaciones de Usuarios Recurrentes de las modalidades de servicio público de Ferrocarril de Media Distancia y Altas Prestaciones de Aragón, Castilla y León, Castilla- La Mancha y Galicia -entre las que se encuentra la de Cuenca- han trasladado en un comunicado «su enorme preocupación por las informaciones contradictorias al respecto de la continuidad de las ayudas al transporte público colectivo de las que nos venimos beneficiando como usuarios recurrentes».
Desde septiembre de 2022 se viene bonificando del 100% de Cercanías y Media Distancia -servicio del que Cuenca carece desde la supresión de la línea convencional Aranjuez-Utiel- así como el 50% de los AVANT y sinergiados de servicios comerciales Alvia o Ave, opciones que sí que están disponibles en trenes que pasan y paran por la Estación Cuenca Fernando Zóbel.
«Durante años, venimos defendiendo que se ha de flexibilizar el concepto del uso del tren buscando la rentabilidad económica y social de las inversiones públicas fomentando la ocupación de los trenes y superando la discriminación en la subvención pública del precio final que tenemos los usuarios abonados de tren fuera de los núcleos de cercanías cuando a todos nos asiste el mismo derecho al servicio público esencial de transporte ferroviario», indican las asociaciones de usuarios.
Consideran que los descuentos que se están aplicando están siendo un catalizador de sys propuestas «ya que los aumentos de demanda de la media distancia y la alta velocidad sinergiada constatan que los precios previos eran una barrera que impedía el acceso a este servicio a miles de trabajadores y estudiantes de toda España».
A su juicio, «estos dieciséis meses no pueden quedar en una mera experiencia y, además, en las economías domésticas, las condiciones que han motivado esta iniciativa pionera para favorecer el transporte sostenible y aliviar a las familias no han decaído».
Añaden que «a la vista están los datos y perspectivas proyectadas en todos los organismos para indicadores clave como precio de los alimentos, combustibles y tipos de interés que dificultan nuestra economía».
Por ello piden al Gobierno de España y a todas las fuerzas políticas «sensibilidad y responsabilidad con todas las personas y familias que dependen del transporte en sus actividades diarias y que a la mayor brevedad posible concreten la permanencia, modificación y condiciones de los abonos de transporte a partir del 1 de enero de 2024 confiando en la prórroga de las ayudas vigentes o una revisión que ponga en valor el uso recurrente garantizando precios asequibles para usuarios regulares en todo el Estado».
Los usuarios recurrentes añaden que quieren ser «ciudadanos en pie de igualdad, en el acceso a empleo y formación, también nos mueve una creciente conciencia de la contribución de este transporte verde para luchar contra la contaminación, el cambio climático y que fomenta la transición ecológica: un abono tren para usuarios recurrentes como ya tienen países de nuestro entorno democratiza el transporte que vertebra, iguala y ofrece oportunidades a todas las personas».