El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha indicado que «dejan lecciones las elecciones» y, en este sentido, ha puntualizado que “es evidente a todas luces que el sistema electoral de nuestra Comunidad Autónoma es un sistema deficitario, literalmente mal pensado o pensado mal, no lo sé, pero la realidad es que es bastante increíble que incluso aumentando en porcentaje de votos y en votos se pueda impedir el gobierno de la gran mayoría». En este contexto, ha anunciado en su discurso del Día de la Región celebrado en Manzanares (Ciudad Real) que «una de las prioridades inmediatas que va a tener el nuevo gobierno será abordar una reforma del estatuto de autonomía para eliminar el tapón democrático que se colocó”, es decir, el aumento del número de diputados del parlamento autonómico, lo que rebajaría de facto las barreras de entrada para las terceras y cuartas fuerzas políticas.
Valoración
García-Page ha anunciado que presentará «un programa muy ambicioso, un programa a desarrollar en los próximos ocho años, que pretende ser ambicioso, que pretende ser realista, pero que va a ser muy firme y que pretende ser también muy compartido». Ha manifestado su gratitud a esta tierra, «no sólo porque me ha brindado un orgullo absolutamente indescriptible como político, como responsable público, como persona, si me lo permiten. Es una realidad de verdad absolutamente magnífica, que me renueva en un compromiso permanente con mi tierra».
Ha destacado que «los diez próximos años, salvo que medie un acontecimiento imprevisto, y ya estamos curados de espanto, pueden ser verdaderamente extraordinarios». Para ello, ha manifestado que va a convocar a los que han resultado electos como presidentes de diputación, o lo van a ser en las próximas semanas, o futuros alcaldes en estas fechas en las que se constituyen». Así, ha matizado que, en la próxima década, «esta región llegará a ese medio siglo con más empresas, con más empleo, con más sanitarios, con más docentes, con más trabajadores a favor de la dependencia y de la cohesión social, desde luego muchos más ingresos para nuestro campo a través de la política agraria comunitaria, con infraestructuras de comunicación a la última, con consensos sociales y acuerdos a los que me prestaré desde el primer día de la investidura, con empresarios y sindicatos».
Page ha deseado “para España y para mi tierra certidumbre y estabilidad” ya que, según ha dicho, “la estabilidad es lo más rentable, con diferencia, para un pueblo sobre todo si la estabilidad no lo es solo en el ámbito político sino en complicidad con todo tipo de agentes sociales” Queremos, ha añadido, que “recuperemos capacidad para acuerdos y consensos de estado que transciende generaciones”.
