La Diputación de Cuenca ha comenzado las obras de reparación y adecuación de los 2,4 kilómetros de camino que separan Nohales de Cuenca capital con una inversión de 205.000 euros. El firme presentaba grietas y deformaciones, también están muy afectados todos los elementos de drenaje del camino, tanto longitudinal como transversal, por esta razón, se acomete esta actuación que permitirá mejorar el firme y la seguridad en los desplazamientos.
El presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, ha visitado este miércoles el inicio de las obras junto al alcalde conquense, Darío Dolz, y el concejal de Servicios Públicos, Obras, Medio Ambiente y Movilidad, Adrián Martínez; actualmente se han llevado a cabo las labores de limpieza de cunetas y en los próximos días comenzarán los trabajos de asfaltado.
El dirigente provincial ha recordado otras inversiones que la Diputación de Cuenca ha llevado a cabo en el entorno de la capital como los caminos vecinales de Arcas a Mohorte, el que va de Buenache de la Sierra a Valdecabras o el de Beamud al albergue provincial Fuente de las Tablas. Ahora se refuerza esta colaboración institucional con esta nueva obra que se enmarca dentro de la inversión que la Diputación de Cuenca está llevando a cabo en materia de caminos que suman “más de 20 millones de euros para intervenir en 450 kilómetros de caminos” algo que beneficia directamente al medio rural y a los municipios más pequeños, según ha apostillado Martínez Chana.
El alcalde de Cuenca, por su parte, ha detallado que esta obra tiene un periodo de ejecución de seis meses y se van a mejorar de forma notable las comunicaciones de los usuarios de esta vía. Este ejemplo es una muestra más, a juicio de Dolz, del “buen resultado que está teniendo para los vecinos y vecinas la alineación de administraciones”.
Nohales tiene una población que constituye un barrio residencial, por lo que los desplazamientos a la ciudad son diarios y muy frecuentes, sobre todo de vehículos ligeros. Además hay parcelas agrícolas colindantes a este camino, por lo que también hay cierto movimiento de vehículos pesados.
Las obras van a consistir en la apertura y limpieza de cunetas en todo el tramo para facilitar y mejorar el drenaje longitudinal y transversal, así como la ejecución de 200 metros de cuneta revestida de hormigón. En las zonas donde el firme esté más deformado se va a extender una capa de 3 centímetros y posteriormente se aplicará una capa de rodadura de 5 centímetros de espesor.
El proyecto también contempla el desmontaje y la reposición de un tramo de 100 metros de barrera bionda situada al inicio de la obra y el cambio de barandillas situadas como protección de dos obras de drenaje transversal, que no cumplen el nivel de contención necesario, y la colocación de barrera bionda. Por último, se procederá a la reposición de la señalización horizontal y vertical.