El pasado jueves 8 de marzo se celebraba el Día Internacional de la Mujer. Ana María Valladolid es una de las muchas mujeres de nuestra provincia que decidieron arriesgar por un proyecto del que hoy en día no se arrepiente. Ella, con su ejemplo, ha seguido la senda que otras le permitieron caminar sobre un sector donde encontrar mujeres no era lo más habitual. Aunque reconoce que el contexto ha evolucionado enormemente durante las últimas décadas, subraya que todavía queda mucho por hacer. Ana María Valladolid es la actual gerente de Rubiocar, puesto que ocupa desde el año 2012 en esta empresa conquense dedicada al transporte de viajeros. Cuenta con más de 200 empleados y está afincada en Villares del Saz desde sus orígenes.
La asociación de Mujeres empresarias de la provincia de Cuenca le ha reconocido recientemente con el galardón principal de sus primeros premios a las mujeres empresarias de la provincia. ¿Qué significa para usted esta distinción?
Me ha hecho mucha ilusión, sobre todo porque el mundo empresarial es muy desagradecido. Que alguien se fije en un momento determinado en una trayectoria empresarial en un sector donde son los hombres mayoritariamente los que dirigen y donde es difícil encontrar mujeres que ocupen puestos de relevancia, es algo que resulta muy gratificante.
El mes de marzo está marcado por la figura de la mujer, ¿Qué es para usted el feminismo y qué cambiaría de este movimiento para que la igualdad de oportunidades sea una realidad entre hombres y mujeres?
Para mí el feminismo de verdad es el trabajo que a lo largo de la historia han hecho mujeres valientes y luchadoras que se han hecho respetar, que nos han abierto camino a las generaciones posteriores y que somos nosotras ahora las que tenemos que seguir trabajando mucho para que realmente haya igualdad entre hombres y mujeres, con nuestro ejemplo y con nuestra ayuda. Nosotras podemos llevar a cabo cualquier trabajo y debemos conseguir ocupar el puesto que queramos por nuestros méritos y no por el género al que pertenezcamos.
Cómo fueron sus comienzos en el sector empresarial, muy probablemente este sector haya experimentado cambios muy sustanciales a lo largo de las últimas décadas. ¿Cómo era y cómo ha evolucionado este importante sector en la provincia?
Yo empecé muy joven ayudando a mi marido en su empresa y juntos hemos conseguido la que actualmente todo el mundo conoce, pues hemos transportado a una generación de niños al colegio, a hacer deporte, de excursión y nuevamente volvemos a llevar a sus hijos al colegio.
Durante los primeros años, todos los empresarios del mundo del transporte eran señores y aunque sigue siendo un sector de hombres, cada vez hay más mujeres que ocupan puestos de responsabilidad en las empresas de transportes, bien por contratación o por sucesión de la empresa familiar. Igualmente todos nuestros trabajadores –conductores- eran hombres. En la actualidad más del 10% de los puestos de conductor son ocupados por mujeres en nuestra empresa, mujeres que realizan su trabajo con total igualdad y de las que me siento muy orgullosa, ojalá pronto podamos incorporar más mujeres a nuestras filas, las animo a que se formen en el mundo del volante porque lo pueden hacer extraordinariamente bien. Aun así, el sector del transporte a nivel general es todavía un sector de hombres.
¿Se ha encontrado en alguna ocasión con discriminaciones por el hecho de ser mujer que toma decisiones importantes para su negocio?
No, nunca en absoluto, yo he tenido mucha suerte tanto con mi familia como con la gente que me ha rodeado, pero me consta por muchos testimonios de mujeres, que muchas de ellas sufren discriminaciones a diario por ocupar puestos que habitualmente lo venían ocupando los hombres.
Su bagaje en la empresa le hace ser una empresaria ejemplar en la provincia. ¿Alguna otra empresa conquense le han pedido consejo en alguna ocasión?
La provincia de Cuenca es una provincia muy pequeña y además cada vez ha ido perdiendo mucho tejido empresarial. A nivel de la zona centro del país si es verdad que tengo contacto con muchos colegas y yo siempre me he sentido muy respetada y muy querida entre la gente de mi sector.
Para mí el feminismo de verdad es el trabajo que a lo largo de la historia han hecho mujeres valientes y luchadoras que se han hecho respetar, que nos han abierto camino a las generaciones posteriores y que somos nosotras ahora las que tenemos que seguir trabajando mucho para que realmente haya igualdad entre hombres y mujeres.
¿En qué momento se encuentra el sector del transporte de viajeros en estos momentos?
Hemos atravesado los momentos más complicados de nuestra historia: Acabamos de salir de una pandemia que a este sector lo ha vapuleado literalmente. Al transporte de viajeros nos ha tocado de lleno, ahora mismo nos encontramos remontando bastante bien pero han quedado secuelas. Y después de la pandemia llegó la guerra de Ucrania con la consiguiente subida de combustibles, de materiales, repuestos, escasez de vehículos. Actualmente, el principal problema que nos encontramos es que todas estas subidas no las podemos repercutir al cliente final porque en la mayoría de los casos realizamos trabajos para la administración pública, rutas escolares, líneas regulares y estos contratos se encuentran firmados algunos desde hace 5 años y sin posibilidad de revisar precios. Por ello nos encontramos entre la espada y la pared: Debemos cumplir con los contratos, pero no podemos repercutir todas las subidas que nos han sobrevenido y que eran impensables en el momento en el que se contrajeron estas obligaciones. Por otro lado, el resto de servicios están marchando a buen ritmo, se está recuperando gran parte de la movilidad porque la gente quiere recuperar el tiempo perdido y no paran de viajar y hacer actividades.
Hablemos de su empresa, Rubiocar es el operador de viajeros más importante de Castilla-La Mancha y cuenta con una amplia implantación en la Comunidad de Madrid, ¿Cuántos trabajadores forman la plantilla de Rubiocar?
Actualmente nuestra plantilla la forman más de 200 trabajadores y trabajadoras, distribuidos en diferentes centros de trabajo, contamos con una base principal con talleres y oficinas ubicada en Villares del Saz, y luego tenemos otros seis garajes más : Cuenca, Motilla, Tarancon, Ocaña, Toledo y Madrid y desde todos ellos damos cobertura a más de 120 rutas escolares en las tres provincias a todas las líneas regulares que conectan los pueblos y ciudades de Castilla La Mancha y a numerosos colectivos como equipos deportivos, asociaciones, agencias de viaje, que confían sus viajes a nuestra empresa.
Cómo ha sido pasar esa situación sin haber tenido margen a la previsión.
Equilibrando todos los gastos e intentando sobrevivir. Sí que es verdad que entre la pandemia y la subida de combustibles muchas empresas han desaparecido del mapa, empresas que en ese momento tenían algún problema económico, la pandemia se las ha llevado por delante. Gracias a una buena salud empresarial basado en un programa de ahorro y reinversión hemos conseguido hacer músculo para afrontar lo que en este caso nos llegó y que fue algo inimaginable y por lo tanto no estaba contemplado en nuestras previsiones.
El principal problema que nos encontramos es que todas estas subidas no las podemos repercutir al cliente final porque en la mayoría de los casos realizamos trabajos para la administración pública, rutas escolares, líneas regulares y estos contratos se encuentran firmados algunos desde hace 5 años y sin posibilidad de revisar precios
Rubiocar nació como una empresa familiar y se ha transformado en un músculo bastante importante en el sector empresarial de nuestra región, cómo se realiza ese cambio en tan poco espacio de tiempo.
A decir verdad, no ha sido en tan poco tiempo. La empresa nació con un solo autobús. Empezó mi marido en su momento, hace más de cuarenta años y nos hemos basado en aprovechar todo el trabajo que se nos presentaba, pero siendo muy cuidadosos y trabajando muchísimo. También hemos sido muy valientes a la hora de invertir, pero bueno siempre ha sido con paso firme y sobre todo viviendo por y para la empresa, sacrificando muchas cosas, esta es la única forma de haber podido llegar a lo que hoy somos. Tampoco hay que pasar por alto que hemos tenido varias transformaciones. Hace once años nos fusionamos con otra empresa también de una capacidad similar a la nuestra, que posteriormente absorbimos y aquello nos permitió hacernos más potentes en un sector en el que ahora mismo o creces o desapareces, no te puedes quedar estancado. Aquello nos permitió hacernos fuertes y salir a ampliar nuestro ámbito de trabajo, porque si te quedas en un solo territorio o en una sola actividad, corres el riesgo de que se venga todo abajo. Por ello, hemos diversificado el territorio, el tipo de clientes y diferentes tipos de tipos de trabajos. Creo que esa ha sido una de las claves del éxito.
¿Es sencillo tomar decisiones sabiendo que las consecuencias podrían afectar a tantas familias de forma directa?
No es sencillo, date cuenta que son más de 200 familias que en mayor o menor grado su economía depende de esta empresa. Por lo tanto nunca es fácil tomar decisiones pero siempre se han tomado para intentar hacer el bien, la supervivencia y el éxito de la empresa y del bienestar de todos sus trabajadores. Creo que al final han sido decisiones acertadas.
En el año 2019 fuisteis distinguida como empresa del año. Dice mucho de su gestión.
Fue también un premio muy bonito, se trataba de una distinción a nivel nacional y nos sirvió para darnos a conocer más y garantizar la trayectoria que venimos llevando a cabo a lo largo de la historia de la empresa.
Cuántos viajeros se han utilizado vuestros medios de transportes a lo largo del último año, ¿se han recuperado los datos previos a la pandemia?
En nuestra actividad es difícil medir los viajeros y te explico por qué. Tenemos tres pilares fundamentales: uno es el transporte regular de viajeros donde se puede medir por viajeros y que ha recuperado cifras anteriores de pandemia. Por otro lado, está el transporte escolar, que se mide por rutas escolares, en este caso estamos en el mismo orden que había justo antes de la pandemia. Y luego, en cuestión discrecional, es decir, los viajes que cada uno pide para ir de excursión, a eventos, a competiciones, etc. Aquí se mide en número de servicios que se hacen al año. Y desde luego este año pasado ya fue un buen año de recuperación y este se prevé, ya estando a las puertas de la temporada fuerte, que será una buenísima campaña. Con lo cual estamos en números superiores a la prepandemia.
Nunca es fácil tomar decisiones pero siempre se han tomado para intentar hacer el bien, la supervivencia y el éxito de la empresa y del bienestar de todos sus trabajadores.
Se trata, a su vez, de cambios que se han ido produciendo conforme se iban flexibilizando las medidas sanitarias.
El año pasado todas las empresas andábamos con un poco de miedo, nadie nos atrevíamos a invertir como se venía haciendo en este sector porque se suele renovar continuamente el material. Los vehículos van cumpliendo años y en cada momento se prevé el número de vehículos que hay que renovar cada año, todo esto se dejó de hacer. De pronto llegó el verano y todo el mundo se olvidó de la pandemia y comenzaron a solicitar viajes y fue una locura, muchas empresas no estaban preparadas para cubrir la demanda de sus clientes. Este año será la primera temporada que ya realmente hemos vuelto a la normalidad con el consiguiente problema de la escasez de vehículos y de que no se ha renovado parque, nuestra empresa se ha puesto al día enseguida en esta cuestión y está preparada para atender la demanda de sus clientes, aunque pienso que todavía pasará un tiempo hasta que todo se vaya equilibrando.
Emprender siempre es una tarea llega de dificultades en la cual hay que tomar decisiones sabias y valientes. ¿Qué mensaje les mandaría a aquellas personas que están dando sus primeros pasos con sus respectivos proyectos?
Que sean valientes, que arriesguen, que no esperen que nadie les solucione su vida sino que tiren hacia delante y que sean dueños y dueñas de su destino y lo hagan en el lugar donde decidan vivir. Nosotros un día decidimos hacerlo desde un pueblo de poco más de 400 habitantes y fíjate hasta donde hemos llegado. Hemos mantenido en el pueblo todos nuestros impuestos y desde ahí dirigimos toda la empresa.
La sede de Rubiocar está localizada en Villares del Saz, no se ha modificado.
Yo siempre digo que los autocares tienen ruedas, por lo que se pueden llevar donde tienen que prestar el servicio. Es evidente que donde hay más población, hay mayor posibilidad de negocio, porque nos dedicamos a transportar personas. Por esa razón tenemos varias bases repartidas. Pero el domicilio de la empresa, toda la administración y todo el taller lo tenemos en Villares. Hasta allí se desplazan todos los días gente a trabajar. Allí lo hemos conseguido unificar todo y estamos muy cómodos y muy contentos y orgullosos de estar en el pueblo. Tiene ciertos inconvenientes, pero ayudamos a mantener vivos nuestros pueblos y tenemos una mayor calidad de vida. Además, la Ley contra la Despoblación, está ofreciendo ventajas para la instalación de nuevas empresas, ojalá que esta ley favorezca la generación de nuevas empresas en pueblos pequeños porque eso al final aumenta y fija población.
El año pasado todas las empresas andábamos con un poco de miedo, nadie nos atrevíamos a invertir como se venía haciendo en este sector porque se suele renovar continuamente el material.
¿Cuáles son los planes de su empresa a corto, medio y largo plazo?
Hoy en día pocas cosas puedes dar por seguras y pocos puedes prever. Cuando tienes planes de futuro y llega una pandemia como la que llegó te deja un poco descolocado.
Pero esta empresa siempre ha sido dinámica y moderna y ha sabido adaptarse a las necesidades de la gente y en esa línea es en la que nos vamos a mantener, innovando, generando empleo y seguir prestando nuestros servicios de manera responsable, segura y cómoda.
Y para finalizar, que mensaje le gustaría se podría transmitir para que el fomento empresarial entre los jóvenes conquenses genere más interés, especialmente entre las mujeres.
Las mujeres hoy podemos hacer todo lo que nos propongamos en cualquier ámbito y en cualquier sector, aunque históricamente se haya tratado de un sector de hombres. Nadie nos va a solucionar la vida. Que no tengan miedo a enfrentarse a cualquier reto y luchen por la igualdad de oportunidades.